
A partir de los 45 años, la piel empieza a experimentar cambios bastante notables como consecuencia del paso del tiempo, la disminución hormonal que precede a la menopausia o los altos niveles de estrés. Concretamente, se produce una disminución notable de la producción de colágeno y elastina, así como de los niveles de hidratación, el ciclo de renovación celular es más lento y la piel se vuelve más fina y vulnerable, lo que se traduce en una barrera cutánea más débil, un aumento de la flacidez, las manchas faciales y la profundidad de las arrugas, tono apagado, textura desigual y aspecto fatigado. La buena noticia es que puedes ponerle remedio fácilmente. ¿Cómo? Adaptando tu rutina de skincare a las nuevas necesidades de tu piel.
Y, como nos gusta ponerte las cosas muy fáciles, hoy vengo a traerte la rutina perfecta para pieles con más de 45 años en solo 4 pasos.
¿Qué cuidados de la piel necesito a los 45?
Como te comentaba más arriba, a partir de esta edad la piel necesita recuperar su producción de colágeno y elastina, acelerar la renovación celular, reponer la hidratación para fortalecer su barrera protectora y una protección más intensa contra las manchas faciales y los signos de cansancio. Por eso, te van a venir muy bien cosméticos que contengan en su formulación activos hidratantes como el ácido hialurónico, las ceramidas o la glicerina; ácidos AHA y BHA, retinol o bakuchiol para estimular su renovación; vitamina C para mejorar la luz y el tono de la piel; niacinamida para mejorar su textura; y péptidos para afinar las arrugas y líneas de expresión.
En cuanto a los productos, es fundamental que uses:
- Un limpiador suave, en texturas cremosas que mantengan la hidratación y los lípidos de la piel.
- Un tratamiento antiedad en formato de sérum que estimule la renovación celular, tenga propiedades despigmentantes y se encargue de difuminar los signos de la edad.
- Una crema facial que hidrate tu piel en profundidad.
- Un protector solar con protección elevada para bloquear los daños de la radiación solar e, idealmente, la contaminación y otros agentes externos.
Pero además, si quieres ir un paso más allá y no te importa que tu rutina sea más larga, te va a venir muy bien aplicar un exfoliante semanalmente y utilizar una mascarilla hidratante o reafirmante entre una y dos veces por semana. Y, si añades a tu dieta alimentos ricos en omega-3, vitaminas y antioxidantes, o suplementos de magnesio, colágeno hidrolizado o biotina que aporten a tu organismo ese extra que no es capaz de producir o conseguir a través de tu alimentación, tendrás el combo ideal.
Notiespartano/HOLA