Raúl Araújo, el segundo de los siete magistrados del Tribunal Superior Electoral (TSE) en votar en el juicio contra el expresidente brasileño Jair Bolsonaro por abuso de poder, absolvió al líder ultraderechista y rechazó la recomendación del instructor del proceso de dejarlo inelegible hasta 2030.
Araújo fue el primero de los seis magistrados que se tienen que pronunciar este jueves en el juicio contra el exmandatario por «abuso de poder político» en las elecciones de 2022, que puede inhabilitar al líder de la ultraderecha por ocho años.
El instructor del juicio, el magistrado Benedito Gonçalves, que votó en la audiencia realizada el pasado martes, consideró como probada la culpabilidad del exjefe de Estado y pidió que la máxima corte electoral lo deje inelegible hasta 2030.
Araújo, por el contrario, alegó que la Justicia tiene que tener una «intervención mínima» en el proceso electoral y citó al argumento usado en un juicio similar por el magistrado Gilmar Mendes, uno de los miembros de la Corte Suprema, de que el Tribunal Electoral no fue creado para «despojar mandatos».
El juez que absolvió a Bolsonaro también argumentó que el derecho de libertad de expresión del entonces presidente tiene que ser respetado y afirmó que, pese a que realizó una propaganda electoral antes del comienzo de la campaña, el discurso del líder ultraderechista ante un grupo de embajadores atacando el sistema electoral brasileño no tuvo nada «fuera de lo normal».
Descalificación del sistema electoral
El punto central del juicio es precisamente la reunión a la cual Bolsonaro convocó a medio centenar de embajadores extranjeros en la residencia oficial de la Presidencia, el 18 de julio de 2022, para descalificar de manera grave el sistema electoral.
«El contenido del discurso, en sus trechos censurables, surtió poco efecto en cuanto a su supuesto intento de deslegitimar las urnas, que es el argumento central de la denuncia», afirmó Araújo.
De acuerdo con el magistrado, si el discurso de Bolsonaro hubiese tenido el efecto de generar desconfianza en el proceso electoral, como señala la denuncia, se habría verificado una reducción en el número de votantes en Brasil, algo que no ocurrió.
El juicio comenzó el jueves de la semana pasada, cuando los siete magistrados escucharon los alegatos de la defensa y de la Fiscalía, que solicitó que el exmandatario sea condenado a un período de inhabilitación política de ocho años.
En la segunda audiencia, el martes de esta semana, Gonçalves dio por probada y votó por inhabilitar a Bolsonaro, que gobernó Brasil entre 2019 y 2022, cuando fue derrotado en las elecciones presidenciales por el progresista Luiz Inácio Lula da Silva.
El pleno del TSE tiene que decidir si el entonces candidato a la reelección cometió los delitos de «abuso de poder político y uso indebido de los medios de comunicación» públicos durante la campaña, según la denuncia presentada por el Partido Democrático Laborista (PDT).
Bolsonaro, de 68 años, insiste en su inocencia y asegura que le gustaría presentarse a las presidenciales de 2026, si no es declarado culpable en un juicio que ha tildado de «politiquero» y «malintencionado».
Notiespartano/ElUniversal