El presidente de la Asamblea Nacional, AN, y jefe de la Comisión del Gobierno venezolano para el diálogo, Jorge Rodríguez, anunció que se incorpora a Alex Saab como miembro plenipotenciario de la mesa de México, «o de Barbados, como se llamó después». También mantendrán a su esposa Camila Fabri, como integrante de la mesa.
Rodríguez celebró la liberación del diplomático Alex Saab, quien estuvo preso en Estados Unidos por 40 meses, al mismo tiempo que aseguró que «tarde o temprano» se conocerán todas las torturas de las que fue víctima el diplomático.
«Además de todo lo que vivió, decimos ahora que más temprano que tarde se conocerán las torturas por las que fue sometido: golpes, ahogamientos, el haberle arrancado a patadas tres dientes», explicó Rodríguez que fue alguna de las presiones que recibió Alex Saab mientras estuvo secuestrado durante tres años por las autoridades de Estados Unidos.
De igual manera, desde el Palacio Legislativo en compañía de Saab y su familia, aseveró que también en los próximos días revelarán las pruebas de la complicidad de los opositores, Juan Guaidó y Julio Borges, en el encarcelamiento ilegal del diplomático venezolano.
Recalcó que Saab nunca debió haber estado secuestrado ni en Cabo Verde ni en los Estados Unidos «y sometido a vejaciones como si de esa manera iban a lograr vulnerar su espíritu y su fuerza».
«Ahora, (Alex Saab) está aquí, recibiendo el homenaje que se merece por el hombre de bien que es, y todo lo que hizo por la Patria venezolana», agregó.
Confesión en el libro
Rodríguez llamó a recordar que las razones por las cuales se capturó a Saab en Cabo Verde, las confesó el exsecretario de Defensa de EEUU Mark Esper en su libro de memorias ‘A Sacred Oath’.
En lectura textual de un pasaje del libro, señaló que «bajo la dirección de Maduro, Saab habría estado en misión especial para negociar un acuerdo para que Venezuela reciba más combustibles, alimentos y suministros médicos».
Así las cosas, el parlamentario recalcó que los supuestos crímenes por los que fue retenido Saab por Cabo Verde y EEUU, en realidad consistían en la búsqueda de alimentos y medicinas para el pueblo venezolano en el contexto pandémico.
La versión de Esper fue corroborada por el exsecretario de Estado Mike Pompeo, quien en sus memorias admitió que nunca existió una orden de captura internacional contra Saab y que la que se mostró a la prensa se emitió varios días después.
Búsqueda de insumos durante la pandemia
«La Administración norteamericana lo consideró una oportunidad para doblegar la fuerza inmensa de nuestro pueblo y de nuestro Gobierno. Hay que ser bestia, hay que ser inhumano para pensar que la pandemia de Covid-19, que mantenía en vilo a la humanidad entera, fuera utilizada por un Gobierno, como es el caso de la Administración Trump, para hacer todo lo posible por impedir que aquí llegaran las vacunas, los medicamentos que necesitábamos», criticó.
Rodríguez aseveró en que durante la pandemia el gobierno de Donald Trump prohibió a los países que se le vendiera a Venezuela cualquier tipo de insumo médico, así como los alimentos para el Clap y luego atacó por el combustible.
«En un momento en el cual nos encontramos en cuarentena, todos los habitantes, donde la capacidad de producción se redujo al mínimo posible, no faltó la bolsa del Clap para que los venezolanos pudieran solventar la cuarentena», indicó, recalcando al mismo tiempo que esto fue posible gracias a las gestiones de Alex Saab.
Oportunidad para el cerco de Saab
El presidente del Parlamento sostuvo que la Administración Trump vio en el secuestro de Saab «una oportunidad» para doblegar al Gobierno del presidente Nicolás Maduro.
«Hay que ser bestia, hay que ser inhumano para pensar que la pandemia de covid-19, que mantenía en vilo a la humanidad entera, fuera utilizada por un Gobierno, como es el caso de la Administración Trump, para hacer todo lo posible por impedir que aquí llegaran las vacunas, los medicamentos que necesitábamos», criticó.
Del mismo modo, reveló que el entonces enviado especial de EEUU para Venezuela, Elliot Abrams, le dijo a la cara que la Casa Blanca presionaría a Caracas hasta lograr la desaparición del chavismo gobernante.
«Ustedes no saben todo lo que podemos hacer contra ustedes. Los vamos a matar de hambre, no vamos a permitir que ninguna aeronave sobrevuele Venezuela, no vamos a permitir que llegue ni un solo litro de combustible», habría dicho Abrams.