El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, analizó hoy con el nuevo comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Oleksandr Sirski, la situación en todo el frente, pero especialmente en dirección de la ciudad oriental de Avidvka tras la retirada de las tropas de la urbe, y en la margen izquierda del río Dniéper.
El mandatario señaló que «Avdivka es una nueva línea defensiva» tras el repliegue de las fuerzas de Kiev hace cinco días de la ciudad, cercana a la capital regional de Donetsk.
Zelenski también afirmó que las fuerzas ucranianas mantienen «de forma fiable» la cabeza de playa cerca de la aldea de Krinkí, en la sureña región de Jersón y situada en la margen izquierda del río Dniéper ocupada por las tropas rusas.
El ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, había declarado este martes que las fuerzas del Kremlin habían expulsado a las tropas ucranianas de la localidad.
El presidente también abordó con Sirski el abastecimiento y el consumo de municiones, misiles y drones, así como por separado «todo» lo relacionado con los cazas F-16 que Occidente ha prometido a Ucrania y que deben de llegar en la segunda mitad del año.
En concreto, Zelenski fue informado sobre el número de bombarderos que serán entregados a Ucrania en el primer lote, las condiciones de la entrega, el estado de las infraestructuras y la evolución de la formación de pilotos que están recibiendo cursos de su manejo y mantenimiento en diferentes países, entre ellos EEUU.
Por otra parte, el mandatario fue informado por el jefe de la inteligencia militar de Ucrania (GUR), Kirilo Budánov, de los «planes del enemigo».
Notiespartano/EFE