Nada como iniciar el día con un sabroso y sustancioso brunch entre amigos y es mejor aún cuando se acompaña con varios tipos de mimosas. Esta bebida es, además de elegante, sabrosa y refrescante. La versión clásica está hecha a partir de jugo de naranja y algún espumante. Para variar su sabor se ofrecen tres combinaciones que le encantarán y le harán quedar muy bien con sus invitados.
Mimosa de tomate de árbol
Puede que la combinación resulte un poco extraña, sin embargo, su sabor es excelso. El jugo de tomate de árbol se complementa a la perfección con el espumoso para dar como resultado a una conjugación de sabores idílica.
Ingredientes
- Jugo de tomate de árbol, ni tan líquido ni tan espeso
- Champagne o cava
- Ruedas de toronja para decorar, opcional
Preparación
La clave para una buena mimosa es la proporción de las bebidas, lo ideal es que se consideren en partes iguales. Teniendo esto en cuenta, vierta en una copa de champagne jugo de tomate árbol hasta la mitad. Rellene el restante de la copa con el espumante. Decore con ruedas de toronja fresca.
Mimosa de melocotón
Un poco más dulce y cremosa que la versión anterior, pero igualmente deliciosa. Es ideal para los amantes del melocotón o de las bebidas sustanciosas.
Ingredientes
- Jugo de melocotón, espeso
- Champagne o cava
Preparación
Vierta en una copa de champagne el jugo hasta la mitad. Rellene el restante de la copa con el espumante. Decore con trozos de melocotón fresco.
Mimosa de fresa
Refrescante y con un toque cítrico. Esta mimosa no solo la querrá tomar durante el brunch, sino también al caer la tarde como aperitivo.
Ingredientes
- Jugo de fresa
- Champagne o cava
Preparación
Sirva en una copa de champagne jugo hasta la mitad. Rellene el restante de la copa con el espumante. Decore con trozos de fresa o de melocotón fresco.