Resequedad, irritación y comezón en las axilas… ¿te suena? Si este es tu caso, no tienes porqué preocuparte, evitar la irritación en tus axilas es más fácil de lo que imaginas. Solo necesitas un desodorante que cumpla con tus necesidades y poner mucha atención a tu rutina de cuidado personal.
Tips
- Exfolia tus axilas
La exfoliación es básica para limpiar a profundidad cualquier parte de tu cuerpo. Esta pequeña acción nos permite eliminar impurezas y células muertas que se acumulan en la piel, en este caso en las axilas. El momento ideal para exfoliarnos es durante el baño, ya que el vapor del agua abre los poros y prepara la piel antes de la limpieza. Procura exfoliar tus axilas una o dos veces por semana con ingredientes naturales.
- Hidrata y humecta tus axilas
Después de toda exfoliación es importantísimo aplicar un buen hidratante para que tu piel absorba el agua y los nutrientes que necesita. Existen sueros y cremas hidratantes para cubrir esta necesidad, pero también debes tomar agua para hidratarte por dentro. Ahora que si sientes tu piel muy seca y acartonada, quiere decir que necesitas humectar tus axilas, o sea, retener la humedad en tu piel para evitar la pérdida de agua.
- Lava diariamente tus axilas
La higiene personal también influye en la salud de tus axilas, por ello es necesario bañarse diario para eliminar la suciedad y malos olores provocados por el sudor. Lava muy bien las axilas con agua tibia y jabón neutro, enjuaga y no olvides secar esta área antes de aplicar tu desodorante o antitranspirante.