Si quieres dar un vuelco a tu vida y buscar ideas para estar saludable quizás una de las recomendaciones mas repetidas que conseguirás es que debes consumir 8 vasos de agua al día. No existe la menor duda de que el agua es un elemento muy importante para muchas funciones indispensables en tu cuerpo. De hecho, es el componente más abundante dentro de ti. Pero, ¿Por qué ocho vasos?
En líneas generales se recomienda que un adulto común consuma un mililitro de agua por cada caloría que gasta. Como el promedio estimado de calorías de la población está alrededor de 2.000 por día, estamos hablando de 8 vasos de 250 mililitros. Este volumen parece ser adecuado cuando es ingerido por una persona sedentaria que esté la mayor parte del día en el aire acondicionado. Pero si realizas actividad física y aparte estás expuesto a medios húmedos y calurosos es bastante probable que necesites consumir más líquidos.
Pero, ¿Más de ocho vasos no son como mucho? Sí, tomar mas de ocho vasos puede ser un esfuerzo importante para la mayoría de la gente, la buena noticia es que todos los líquidos que consumimos a través de las bebidas (jugos, té, café, leche, sopas, etc.) entran en esa cuenta. El Instituto de Medicina de los Estados Unidos recomienda un nivel de ingesta adecuada entre 2,7 a 3,7 Litros al día. Sin embargo, señala que un consumo inferior no representa un riesgo adicional a la salud debido al amplio rango de ingestas que es compatible con una hidratación normal.
¿Y cómo sé si tengo una hidratación normal?
Las necesidades de consumo de agua son muy amplias. Si bien consumir 8 vasos de líquidos al día es una referencia general, fijarnos en algunas señales de nuestro cuerpo es clave para saber si necesitamos beber más o no. Una estrategia muy sencilla es fijarse en el color y el volumen de tu orina cuando acudes al baño. Como los riñones se encargan de mantener la composición líquida de tu cuerpo dentro de un rango bastante preciso, cada vez que estés consumiendo líquidos de más, tu orina será muy clarita y abundante. Esto es una buena señal de que estás bien hidratado y puedes parar la ingesta de líquidos por un rato. Por el contrario, si la orina es oscura y escasa entonces necesitas consumir un poco mas de agua tan pronto como puedas, es así de simple.
Definitivamente, tomar agua es una conducta conveniente pero como todos los nutrientes que necesita nuestro cuerpo es importante mantener un equilibrio. Es decir, si exageras la ingesta mas allá de lo que necesitas tampoco serás más saludable. Tú preocúpate por asegurar una buena disponibilidad (sigue llevando tu botella en el carro, al gimnasio o la oficina) y tu cuerpo se encargará de decirte si estás tomando suficiente o no, sólo tienes que escucharlo y adaptar tu ingesta a lo que te diga.