¿Tienes el pelo delgado, fino, débil y quebradizo? Si es así, debes cuidarlo y lavarlo con productos cero agresivos, porque de lo contrario, agravarán su condición. Una opción para tener tu melena sana es utilizando el champú sin sal, el cual la fortalecerá y la dejará más bonita y abundante. ¿Quieres saber cómo prepararlo en casa? Quédate porque te daremos todos los detalles.
Tu cabello delgado necesita de cuidados especiales, incluso debes cepillarlo adecuadamente porque podrías trozarlo o arrancarlo y no quieres eso. Lejos de pensar en que es una desventaja tu tipo de pelo, sácale provecho y nútrelo con los ingredientes adecuados. Si tu melena presenta debilidad y se quiebra fácilmente, lo mejor es que no uses productos con sal. ¿Por qué? Aquí te cuento.
¿Qué es un champú sin sal?
Como su nombre lo dice, el champú sin sal es libre de sodio, debido a que este ingrediente puede erradicar la oleosidad natural del cabello, dejándolo seco y frágil. Si tu pelo sufre de resequedad lo mejor es que pruebes con productos sin sal.
Tips para cuidar el cabello delgado, fino y escaso
Si tu cabello es delgado, fino y escaso cuídalo de la siguiente manera:
Evita trenzarlo porque podrías arrancar más cabello sin querer.
Cepilla tu cabello con cuidado, sin prisas, porque si lo jalas podrías desprender varios mechones.
Lávalo con frecuencia ya que suele lucir grasoso más rápidamente.
No uses secadoras.
Vitaminas para engrosar el pelo fino y delgado.
Estas son las vitaminas que necesitas para engrosar el pelo delgado:
Vitamina B.
Vitamina E.
Vitamina H o Biotina.
Vitamina D.
champú para cabello delgado y fino
Prepáralo con los siguientes ingredientes:
400 ml de jabón natural sin agregados.
Una cucharada de romero en polvo.
12 gotas de aceite de árbol de té.
Preparación y modo de uso:
Mezcla todos los ingredientes en un recipiente; cuando hayas hecho esto, deposítalos de nuevo en el envase del champú y está listo para usarse. Lava tu cabello dando un suave masaje; deja que actúe durante 5 minutos y enjuaga con abundante agua tibia.
