El jefe de la Organización Internacional de la Energía Atómica, Rafael Grossi, declaró el lunes que, debido al acceso restringido que han tenido sus inspectores en los últimos meses, será “muy difícil” para su organismo restablecer la continuidad del conocimiento sobre el estado del programa nuclear iraní.
En una rueda de prensa celebrada con motivo de la reunión de la Junta de Gobernadores del Organismo Internacional de la Energía Atómica, señaló que “tendremos que trabajar mucho y muy duro e Irán tendrá que ser muy transparente a la hora de darnos acceso a la información, para que podamos volver a tener una imagen” del estado actual del programa nuclear de la República Islámica.
Sin embargo, advirtió que “la brecha de conocimiento es cada vez más amplia y más grande” mientras Teherán siga apagando las cerca de 27 cámaras del OIEA, como ha hecho desde junio.
Grossi: Realmente espero que Irán empiece a trabajar con el OIEA pronto.
También tendríamos que evaluar la exhaustividad y la corrección de los datos adquiridos por nuestros equipos de vigilancia entre el 21 de febrero de 2021 y el 8 de junio de 2022”, dijo a la junta del OIEA.
Además, “seguirían existiendo obstáculos importantes para comprobar la compatibilidad con la situación anterior al 21 de febrero de 2021 del inventario de centrifugadoras y agua pesada que Irán afirma tener”, dijo.
Durante la conferencia de prensa, se le pidió que respondiera a las afirmaciones de Irán de que Grossi tiene prejuicios contra el país porque el OIEA sigue investigando el descubrimiento de material nuclear ilícito por parte de los inspectores del OIEA.
Grossi se burló de esta idea, añadiendo que “no es nuevo observar que cuando el organismo está preguntando ciertas cosas e Irán no quiere o no interactúa de la manera que uno esperaría, que nos acusen de estar politizando”.
Notiespartano/NoticiasdeIsrael