Al menos ocho civiles, entre ellos cuatro niños, murieron en bombardeos atribuidos a Rusia contra áreas controladas por facciones islamistas opositoras al Gobierno de Damasco en las afueras de la ciudad septentrional siria de Alepo, informó este jueves el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
El ataque tuvo lugar contra la ciudad de Al Atareb, en las afueras occidentales de Alepo, donde se desarrolla desde ayer, miércoles, una gran ofensiva lanzada facciones islamistas respaldadas por Turquía contra posiciones del Ejército sirio, cuyo principal valedor es Rusia.
La aviación rusa, que interviene en los combates en favor de las tropas del presidente sirio, Bachar al Asad, desde 2015, «realizó 21 ataques contra varias áreas en las afueras de Alepo e Idlib», los últimos bastiones opositores en el país, dijo la ONG, con sede en el Reino Unido y una amplia red de colaboradores sobre el terreno.
Indicó que en esos ataques aéreos otros 21 civiles resultaron heridos de diversa consideración.
La ofensiva de los opositores ha provocado al menos 153 muertos, entre ellos 80 del Organismo de Liberación del Levante -antiguo Frente al Nusra-, así como 19 miembros de otras facciones islamistas.
Por otro lado, según la ONG, al menos 54 militares del Ejército sirio han muerto, entre ellos cuatro oficiales.
El Ejército sirio no ha reaccionado ante estas bajas, pero sí ha confirmado que están actualmente repeliendo «en cooperación con fuerzas amigas» -en referencia a Rusia- una gran ofensiva lanzada por los «terroristas».
Asimismo, un general de la Guardia Revolucionaria iraní murió en los combates, según informó la agencia iraní Mehr.
Se trata de la primera ofensiva a gran escala de los insurgentes en años en el norte de Siria.
La alianza islamista controla la mayor parte de la vecina provincia de Idlib, y donde desde 2020 está en vigor un alto el fuego acordado por Turquía -valedora de la oposición siria- y Rusia.
Esta ofensiva se produce en un momento en el que Turquía busca restablecer lazos diplomáticos con Siria, aunque el presidente sirio, Bachar al Asad, ha afirmado que Ankara debe retirar sus tropas presentes en varias zonas del norte de Siria y dejar de apoyar a grupos opositores para avanzar hacia el restablecimiento de relaciones, que se rompieron al inicio de la guerra civil siria hace 13 años.
El pasado 12 de noviembre, el enviado especial del presidente ruso, Vladímir Putin, para Siria, Alexandr Lavrentiev, dijo que Moscú no aceptará nuevas operaciones militares de Turquía en Siria.
Notiespartano/efe