Nuevas masacres se registraron en Colombia luego que cuatro personas indígenas awá fueran asesinadas en una zona rural del departamento colombiano de Nariño, fronterizo con Ecuador, crimen que sumado a la masacre de otras cinco personas en el Valle del Cauca (suroeste) deja nueve muertes este domingo (31.07.2022) en el país.
La segunda masacre ocurrió en el caserío de Altaquer, municipio de Barbacoas, donde cuatro indígenas estaban en un billar cuando fueron atacados por hombres armados que llegaron al lugar y dispararon.
El exsenador indígena Feliciano Valencia dijo en Twitter que hubo una «nueva masacre contra el pueblo indígena awá. Fueron asesinados 4 indígenas y 2 más fueron heridos en el corregimiento (caserío) de Altaquer en Barbacoas, Nariño».
Masacres en el Valle del Cauca
Horas antes, cinco personas fueron asesinadas y cuatro más resultaron heridas luego que hombres armados tirotearon a un grupo de lugareños que departían en un barrio de La Unión (Valle del Cauca (suroeste), informó la secretaria de Gobierno del municipio, Jhoana Ayala.
Uno de los casos más recientes de violencia contra los awá ocurrió el pasado 3 de julio, cuando tres jóvenes de ese pueblo fueron asesinados a tiros por disidencias de las FARC en el Resguardo indígena Inda Sabaleta (Nariño), cuando estaban en una reunión.
La Asociación Minga denunció en ese momento que los grupos armados seguían asesinando indígenas pese a que este pueblo es reconocido por la Corte Constitucional en riesgo inminente de extinción y tiene medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
La Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) aseguró la semana pasada que hasta mediados de junio de 2022 habían sido asesinadas al menos 85 personas indígenas en el país, y más de 30 de ellas pertenecían al pueblo awá.
Entre 2016 y 2021, según la oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia, hubo 562 casos de asesinato de defensores de derechos humanos en el país y, entre enero y junio de 2022, recibieron 114 denuncias de esos homicidios, de las que ha verificado 22 y otros 67 casos están en ese proceso.
Informes de la entidad recogen testimonios de algunos de los pueblos y territorios más afectados por el incremento de la violencia, entre ellos la situación que viven indígenas awá, barí, embera, jiw y nasa.
Notiespartano/DW.com/EFE