En las últimas décadas se observa una disminución progresiva de la calidad del semen en los hombres occidentales. Por ello, surgieron diversas teorías que proponen que un estilo de vida poco saludable es el responsable de este fenómeno. Un grupo de científicos intenta demostrar que el consumo de frutos secos puede ayudar a mejorar la calidad del esperma.
La dieta es uno de los factores involucrados en las principales enfermedades que aquejan a las sociedades industrializadas. Por ello, es natural pensar que esa misma deficiencia nutricional está también relacionada con el origen de los problemas que afectan al ámbito sexual.
¿Cómo se mide la calidad del semen?
El estudio de la infertilidad masculina es bastante amplio y complejo. Involucra un enfoque multidisciplinario, puesto que las causas también son múltiples. Sin embargo, existe una prueba de laboratorio que es común y específica a los problemas de fertilidad: el espermograma.
Toma de la muestra
Existen recomendaciones universales para recolectar una muestra de semen. Es aconsejable que se obtenga mediante masturbación, previo aseo de manos y genitales.
El recipiente ideal debe ser estéril, estar tibio y tener boca ancha para evitar perder parte de la muestra. Es importante resaltar que la abstinencia sexual debe ser de al menos 2 días, sin exceder los 7 días.
Por otro lado, resulta ideal que la toma de la muestra ocurra en un espacio íntimo habilitado para tal fin. Si esto no es posible, el transporte debe preservar una temperatura que oscile entre los 20 °C y los 40 °C.
Características macroscópicas del semen
La evaluación inicial debe hacerse tan pronto como sea posible. En esta inspección se determinan las siguientes características físicas del esperma:
- Licuefacción.
- Apariencia.
- Viscosidad.
- Volumen.
- pH.
Aspectos microscópicos del líquido seminal
El estudio de los espermatozoides incluye el recuento de los mismos, pero también debe determinarse la movilidad que poseen, la vitalidad y el porcentaje de espermatozoides vivos. La morfología se logra visualizar con diversas técnicas bajo el microscopio.
Para todo ello se toman pequeños volúmenes con una pipeta. Además, se deben identificar otros elementos celulares que estén presentes en la muestra y el grado de aglutinación.
Factores que disminuyen la calidad espermática
La infertilidad masculina sigue siendo difícil de cuantificar. Por ello es necesario determinar las múltiples variables involucradas en los problemas de fertilidad en el hombre.
Sabemos que existe una posible relación entre algunos hábitos de vida poco saludables, pero bastante frecuentes, y una baja calidad del esperma. Además, las sociedades occidentales están expuestas a diversos factores ambientales que también generan un impacto negativo:
- Consumo de alcohol.
- Tabaquismo.
- Obesidad.
- Alimentación inadecuada.
- Sedentarismo.
- Ejercicios prolongados e intensos.
¿Podría el ambiente incidir sobre la fertilidad?
La exposición a agentes físicos y a sustancias químicas también repercute en la calidad espermática. Entre los factores ambientales que tienen un impacto se encuentran los siguientes:
- La radiación y los campos electromagnéticos. En estos están incluidas las ondas emitidas por los teléfonos móviles.
- El calor, puesto que causa daño a los espermatozoides.
- Los contaminantes como pesticidas y solventes.
- La exposición a metales pesados, entre los cuales los más estudiados son el plomo y el mercurio, al causar daño en el ADN espermático.
Nueces, avellanas y almendras: ¿son los frutos secos ideales para la fertilidad masculina?
Los frutos secos son alimentos con gran valor nutricional, aunque su composición difiere según el tipo de fruto en cuestión. Son ricos en ácidos grasos, vitaminas y oligoelementos.
Por ello, la recomendación actual es consumirlos con regularidad. Sin embargo, los efectos sobre la fertilidad carecían de bases sólidas suficientes para vincularlos de forma directa a un aumento en la calidad del esperma.
Los ácidos grasos están relacionados con diversas funciones importantes, ya que forman parte de la propia estructura celular. La variedad de los ácidos grasos insaturados, como el omega 3, tiene un efecto beneficioso sobre la calidad del esperma.
¿Cómo se llevó a cabo el estudio sobre la calidad del esperma?
La investigación comenzó luego de obtener una población de hombres sanos con edades comprendidas entre los 18 y los 35 años. Tenían en común el hecho de que consumían de forma habitual una dieta occidental.
A ellos se les separó al azar en dos grupos. Al primero se les dio a consumir 60 gramos de frutos secos cada día durante 14 semanas. El segundo grupo sirvió de control.
Las dietas occidentales presentan déficits nutricionales Debido a esto, suplementar con alimentos de alto contenido nutricional, como los frutos secos, pareció razonable a los investigadores.
Utilizaron una mezcla de 30 g de nueces, 15 g de almendras y 15 g avellanas, dando un total de 60 g, el equivalente a dos puñados de frutos secos al día.
Se tomaron muestras al comienzo de la investigación y transcurridas las 14 semanas. Asimismo, se recolectó esperma luego de 3 días de abstinencia sexual. También se llevaron a cabo estudios que permitieron aislar el ADN espermático.
Mejoras en el espermograma
Luego de las 14 semanas de haber comenzado el estudio, se pudo evidenciar una diferencia significativa entre los parámetros del espermograma. En los hombres que consumieron frutos secos hubo un aumento del recuento de espermatozoides, así como una mejora en la motilidad y la morfología.
Metilación del ADN y calidad del esperma
En el estudio se logró evidenciar una pequeña pero significativa diferencia en la metilación de 36 regiones genómicas en el grupo de hombres que consumió frutos secos. Con esto, se puede constatar que los factores externos sí tienen capacidad de modificar la expresión de los genes.
Estas modificaciones en el tiempo repercuten en la fertilidad. Por lo que los estilos de vidas saludables, incluida la alimentación balanceada, constituyen un pilar fundamental en la salud sexual.
El estudio es solo el inicio
La investigación tiene ciertas limitaciones, entre las que se encuentra la reducida población analizada. Por ello, son necesarios más avances que confirmen estos hallazgos.
No obstante, debido a los múltiples beneficios del consumo de frutos secos en la salud general, incorporarlos en la dieta de forma habitual es una opción razonable. Sobre todo si ofrece la ventaja adicional de mejorar la calidad del esperma.