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- La bailarina venezolana Laleska Seidel ha insistido, a lo largo de su carrera en el ballet, en luchar con su talento por sus sueños. A los nueve años comenzó a estudiar danza en la Escuela de Ballet Clásico María Teresa Alford de Barquisimeto, Lara, ciudad en la que pasó gran parte de su infancia a pesar de nacer en Valera, estado Trujillo. Comenzó en el ballet porque sus padres querían que, tanto ella como su hermana menor, hicieran actividades extracurriculares en las tardes. La joven, de ahora 25 años de edad, decidió sumarse a las clases sin grandes aspiraciones. En ese entonces le era imposible saber que, con el tiempo, desarrollaría una gran pasión por la danza clásica que la llevaría, con esfuerzo y dedicación, a convertirse en primera bailarina del Ballet de Santiago, Chile, en enero de 2025.
Lo que comenzó siendo una actividad elegida para mantenerse ocupada en las tardes se fue convirtiendo, poco a poco, en el centro de su vida. Laleska Seidel llegó a la escuela de danza en el Centro Cultural de Cabudare, como principiante, a cargo de la profesora Katherine Heredia. Bastaron unas pocas clases para que su talento la llevara a tomar clases con la maestra María Teresa Alford, quien la marcó profundamente en esos primeros años.
Notiespartano/el nacional