La aplicación de las herramientas de inteligencia artificial en el sector del turismo ayudará a los viajeros a “definir con gran nivel de detalle” sus viajes, por lo que, según los expertos reunidos este miércoles en la conferencia CON-X 23 en Palma, España, podremos personalizar cada pormenor “de una forma muy sencilla y actualizada”.
La especialista de Datos e Inteligencia Artificial en Microsoft, Aroa Fernández, ha explicado que a partir de ahora si una persona viaja a una ciudad como Nueva York, no deberá hacer las mismas actividades que todo el mundo, puesto que a través de ChatGPT “se puede organizar una ruta para visitar sitios especiales y míticos relacionados con la música, por ejemplo”.
Junto a ella, han participado en una mesa redonda de CON-X la vicepresidenta de Datos e Inteligencia Artificial en Expedia Group, Shiyi Pickrell; el director de producto en Slack, Daniel Hansens; y el director general de Quonversa, Iñaki Fuentes.
Como novedad, también ha estado presente la aplicación ChatBot-X, con soporte Azure OpenAI Service de Microsoft, que ha respondido a preguntas sobre sus capacidades, de la que presume ser capaz de entender y responder preguntas: “Tengo el potencial de darles buenas sugerencias para ofrecer consejos”, ha dicho ante los más de 300 asistentes al evento organizado por TravelgateX.
Por su parte, Pickrell ha comentado que “viajar puede ser divertido, pero planearlo puede provocar mucha ansiedad, especialmente si vas a un sitio en el que nunca has estado”, así que se ha mostrado convencida de que la IA nos ayudará en este campo.
En una entrevista con la Agencia EFE ha asegurado que “tanta cantidad de información nos puede sobrepasar” y es necesario que el usuario puedan disponer de ella “solo en su beneficio”.
Otro de los temas de esta conferencia ha sido la protección de datos, tras la polémica en algunos países como Italia por la transparencia de estas herramientas.
El pasado 31 de marzo el país europeo anunció el bloqueo del uso de ChatGPT -ya se puede usar desde finales de abril- por no respetar la ley de protección de datos de los consumidores, y la apertura de una investigación a OpenAI.
En este sentido, Pickrell ha manifestado que las nuevas tecnologías son “emocionantes” pero a la vez “intimidantes”, dado que se encuentra en una fase de expansión que obliga a “trabajar de forma sólida en la protección de los usuarios de forma ética”, una idea que Iñaki Fuentes ha apoyado reclamando total transparencia en su desarrollo.