El Gobierno de Venezuela rechazó este lunes el «repugnante comunicado» del presidente de Argentina, Javier Milei, en el que el ultraderechista repudió la «falsa denuncia de golpe de Estado realizada por el Gobierno de Bolivia» el pasado miércoles.
El Ejecutivo de Nicolás Maduro, a través de un comunicado, acusó al mandatario argentino de alimentar «una narrativa creada por la derecha latinoamericana, que intenta lavarle la cara a los criminales que trataron de derrocar al legítimo presidente (boliviano) Luis Arce».
A juicio del Gobierno chavista, Milei, al que describió como un «oscuro personaje» de «corte neonazi», es «usado como peón de macabros intereses que tratan de imponer el fascismo como una tendencia política» en Latinoamérica.
«Venezuela reitera el llamado a condenar este y cualquier otro intento de golpe de Estado en nuestra América Latina, tal como fue realizado de manera unánime por los países suramericanos, incluyendo, por cierto, a la propia Argentina, hecho que lamentablemente es desconocido por quien dice gobernar este país», agregó.
Este domingo, la Presidencia argentina expresó en el comunicado que «el relato difundido» en Bolivia «era poco creíble y los argumentos no encajaban con el contexto socio político del país latinoamericano».
En opinión de Milei, «hace tiempo que la democracia boliviana está en peligro, no por un golpe militar, sino porque históricamente los Gobiernos socialistas derivan en dictaduras», por lo que espera que «prevalezca la democracia que hace años está siendo atacada en el Estado Plurinacional de Bolivia»,
De igual forma instó a la fuerzas políticas de ese país a «garantizar el Estado de Derecho en su territorio».
El 26 de junio, Bolivia fue sacudida por un «intento de golpe de Estado» perpetrado por un grupo de altos mandos militares disidentes que buscaban derrocar al gobierno del presidente Arce.
Los conspiradores intentaron tomar el control de varias instalaciones clave en La Paz, incluida la sede del Gobierno y medios de comunicación.
Posteriormente, surgieron sospechas entre algunos sectores de la oposición y ciertos analistas políticos de que el evento podría haber sido un montaje.
Sin embargo, el Ejecutivo ha negado rotundamente estas acusaciones, asegurando que el golpe fue real y que actuaron para proteger la democracia y el orden constitucional del país.
Notiespartano/efe