Un colectivo de 336 organizaciones sociales, líderes comunitarios y religiosos venezolanos han emitido una demanda pública para una investigación confiable y transparente sobre la muerte del misionero y defensor de los pueblos indígenas, Josiah K´Okoal, de origen keniata.
Este grupo, compuesto por activistas sociales y defensores de derechos humanos, insta a las autoridades, en particular al Ministerio Público, a responder a las denuncias que K’Okoal había estado haciendo sobre las violaciones de los derechos de las comunidades indígenas en Venezuela.
El pasado 2 de enero, la Iglesia Católica venezolana y los pueblos indígenas de los estados Delta Amacuro, Bolívar y Amazonas, se conmocionaron al enterarse de la trágica muerte del padre Josiah K’Okoal.
K’Okoal era muy apreciado entre las comunidades originarias de Venezuela por su labor en defensa de los derechos humanos. Había estado denunciando la trata de indígenas, entre otras situaciones. “Están pasando mucha hambre”, había dicho en varias oportunidades.
Representantes de ONGs y líderes sociales, exigen una investigación exhaustiva
En un comunicado firmado por representantes de las organizaciones y líderes sociales, exigen una investigación exhaustiva sobre este caso, por el bien de los pueblos indígenas que quedan sin un gran defensor de sus derechos humanos.
Asimismo, solicitan que se promuevan políticas públicas que se enfoquen en el impacto de la Emergencia Humanitaria Compleja en las comunidades más vulnerables del país, especialmente los pueblos originarios.
K’Okoal, de 54 años, vivía en Tucupita y desde 2006 había estado acompañando a los indígenas de esos estados, especialmente al pueblo Warao, cuya lengua hablaba perfectamente y varias lenguas indígenas más. Su labor y compromiso con los derechos humanos de las comunidades originarias de Venezuela eran muy apreciados entre ellas.