El Parlamento Europeo urgió este jueves a un alto el fuego permanente en el conflicto entre Israel y Gaza condicionado a la liberación inmediata de los rehenes y al desmantelamiento de Hamás, y condenó tanto los atentados de este grupo terrorista como la «desproporcionada respuesta militar israelí» y su magnitud «sin precedentes» de víctimas civiles.
La resolución, que salió adelante por un escaso margen, fue impulsada por los grupos socialdemócrata, liberal y de los Verdes y, tras el voto de varias decenas de enmiendas, acabó puntualizando a petición del Partido Popular Europeo que el alto el fuego permanente y la reanudación de esfuerzos por una solución política deben ir condicionados a la liberación de los rehenes y el fin de Hamás.
Esta enmienda salió adelante por un escasísimo margen, con 257 votos a favor, 242 en contra y 17 abstenciones, mientras que el conjunto del texto obtuvo 312 votos a favor, 131 en contra y 72 abstenciones.
El término «alto el fuego permanente» en el texto parlamentario, aún con las condiciones asociadas y logrando una mayoría algo más reducida, es algo más ambicioso que el consensuado en octubre en la primera reacción de la Eurocámara al estallido del conflicto, que pedía en su lugar una «pausa humanitaria» a falta del acuerdo para pedir el alto el fuego.
Tres meses después de los atentados y tras el recrudecimiento de la ofensiva israelí en los territorios palestinos, la Eurocámara vuelve a reconocer el derecho de Israel a defenderse «dentro de los límites del Derecho internacional».
Acceso humanitario
En esta ocasión, no obstante, elabora que estos límites establecen que «todas las partes en un conflicto deben distinguir en todo momento entre combatientes y civiles, que los ataques deben dirigirse únicamente a objetivos militares y que los civiles y las infraestructuras civiles no deben ser objeto de ataques».
La Eurocámara insiste también en que se debe garantizar el acceso humanitario para atender las necesidades médicas de los rehenes y para repatriar los cuerpos de los que han muerto; en cualquier caso, añaden, «la toma de rehenes es una violación del derecho internacional y constituye un crimen de guerra» por lo que quienes perpetraron y planearon estos delitos deben rendir cuentas.
El acceso humanitario, añaden, debe ser «pleno, rápido, seguro y sin trabas a toda la franja de Gaza», donde la situación humanitaria está sufriendo un «grave y rápido deterioro»; Israel debe permitir el suministro ininterrumpido de productos esenciales como combustible, alimentos, agua, suministros médicos y refugio.
Notiespartano/EFE