El Centro Venezolano Americano de Margarita, Cevamar, se convirtió en un espacio de encuentro para amantes de la música y la cultura venezolana, gracias al conversatorio ‘Conocimientos sobre la Percusión Folklórica’, dictado por el destacado cultor Carlos Sotillo.
Con cada golpe de tambor, el alma venezolana se hizo presente en Cevamar. Sotillo, con su pasión y conocimiento, nos transportó a través de un viaje sonoro por las raíces de nuestra música, revelando cómo la percusión folklórica es mucho más que ritmos y melodías: es la esencia misma de nuestra identidad.
La fusión de elementos indígenas, españoles y africanos, presente en cada instrumento, fue analizada en profundidad por el cultor. Sotillo destacó la importancia de preservar estas tradiciones ancestrales, que nos conectan con nuestras raíces y nos permiten fortalecer nuestro sentido de pertenencia.
“La percusión folklórica es un tesoro invaluable que debemos proteger y transmitir a las futuras generaciones”, afirmó Sotillo. “Cada ritmo es una historia, cada melodía es una tradición que nos define como venezolanos”.
“La música, como lenguaje universal, es un reflejo fiel de nuestra cultura. Pudimos apreciar cómo la percusión folklórica venezolana no solo es una expresión artística, sino también un vehículo para transmitir historias, tradiciones y valores”, dijo Magaly Guédez, directora de Desarrollo Social y Gestión Cultural del Centro.
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