Si tienes un Xbox desde la generación de Xbox One o llevas un rato con tu Xbox Series X|S sabes que el ecosistema de Microsoft tiene un grave problema: su DRM puede ser verdaderamente agresivo, incluso con juegos físicos. Afortunadamente, Microsoft ha escuchado las quejas de su comunidad y lanzó una solución que soluciona uno de los problemas más grandes de las últimas 2 generaciones de consolas de Microsoft.
Por medio de redes sociales, Eden Marie, jefa de ingeniería de Xbox, reveló que desde la actualización 2206 se redujo la cantidad de revisiones DRM (siglas en inglés para gestión de derechos digitales) para el uso de juegos físicos de Xbox. Esto quiere decir que es muy poco probable que tu consola te vaya a pedir que te conectes a Internet para que puedas disfrutar tus juegos en físico.
Ahora bien, aunque el panorama DRM mejoró considerablemente en el ecosistema Xbox con este cambio, la realidad es que no significa que tu consola funcionará a la perfección sin conectarse a Internet. Lo que pasa es que es posible que algunos juegos necesiten descargar contenido después de la instalación para funcionar; también hay otros que no incluyen todo el contenido en el disco y que obligatoriamente necesiten conexión a Internet para poder usarse.
“Examinamos los datos desde el lanzamiento de Series X|S y determinamos que la revisión online de compatibilidad no es necesaria con la mayoría de los casos de discos para Xbox One. Algunos juegos podrían necesitar una actualización online después de la instalación para garantizar la mejor experiencia”, explicó.