Ucrania dio salida a un total de 14 buques, uno de ellos fletado por el Programa Mundial de Alimentos para paliar la hambruna en Etiopía, en las últimas horas, de puertos ucranianos a través del corredor humanitario naval pactado con Turquía y la ONU.
La travesía tuvo lugar con el visto bueno de Turquía y a pesar que el domingo pasado, como respuesta a un ataque con drones al puerto de Sebastopol, Rusia anunció su negativa a participar en el mecanismo que permite dicha circulación.
«Incluso si Rusia tiene sus dudas porque no gozó de los mismos beneficios, nosotros proseguiremos decisivamente con nuestros esfuerzos para servir a la humanidad», sentenció el presidente turco Recep Tayyip Erdogan.
El lunes, el presidente ruso Vladimir Putin matizó que «no se refería a terminar su participación», sino a «suspenderla».
Su papel central consiste en proporcionar funcionarios para el centro de inspección que, desde Estambul, investiga los buques que salen y entran al Mar Negro para asegurarse de que no transporten bienes ilícitos como armas.
Esta nueva posición rusa hace temer un incremento del riesgo de sufrir incidentes en aguas del Mar Negro.
Con todo, más de 425.000 toneladas de productos alimenticios pudieron atravesar las aguas que bañan Ucrania a principios de esta semana.
Entre sus destinos están España, China o Marruecos. Al mantener la firma en documento que pactó con la ONU y Turquía, paralelo a otro que levanta las sanciones a la exportación de fertilizantes rusos, Rusia está obligada a no atacar barcos civiles.
Hacerlo supondría, además, una violación de la legislación internacional.
Notiespartano/ElMundo