El jefe de la inteligencia ucraniana, Kyrylo Budanov, aseguró este viernes que el reciente ataque con drones contra un aeropuerto del noroeste de Rusia se llevó a cabo desde territorio ruso, en plena contraofensiva para liberar las zonas ocupadas. Según datos proporcionados por Kiev y también por medios rusos, cuatro aviones de transporte fueron destruidos o dañados en la acción.
«Los drones usados para atacar la base aérea ‘Kresty’ en Pskov fueron lanzados desde Rusia», afirmó Kyrylo Budanov este viernes en Telegram, incluyendo en su mensaje un enlace a una entrevista que ofreció al medio The War Zone. Es la primera vez que Kiev reconoce operar desde dentro del territorio ruso, donde se han producido varios bombardeos con drones y presuntos actos de sabotaje.
«Operamos desde el territorio de Rusia», insistió Budanov en la entrevista con The War Zone. Según esa publicación, el responsable militar no precisó si el ataque contra Pskov fue obra de sus hombres o de combatientes rusos que actúan a cuenta de Ucrania. El Kremlin, por su parte, rechazó comentar la reivindicación. El portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, consideró que se trataba de «una prerrogativa de nuestros militares».
Aviones al Extremo Oriente
Según Budanov, dos aviones militares rusos fueron destruidos y otros dos gravemente dañados. The War Zone publicó imágenes satelitales de las aeronaves calcinadas. La semana pasada, un ataque parecido impactó en un aeródromo de Novgorod, una región vecina, destruyendo o dañando al menos un avión militar.
Los ataques ucranianos con drones de largo alcance contra aeródromos rusos están obligando a Moscú a replegar sus aviones lejos de Ucrania, en algunos casos hasta las regiones del Extremo Oriente, afirmó el portavoz de la Fuerza Aérea ucraniana, Yuri Ignat. «Rusia ya no puede sentirse segura en la larga distancia, y tiene que dispersar su aviación hasta el mismo Extremo Oriente”, dijo Ignat en una entrevista con el servicio nacional televisivo de noticias de Ucrania.
Notiespartano/DW.com