Las tortas de queso son una delicia, tanto las de origen criollito como las importadas chesse cake son maravillosas al paladar. Siempre quedan divinas, son cremosas, pueden combinarse creativamente con diversos ingredientes y cuando se trata de lucirse con un postre súper especial resultan esplendidas.
Ingredientes
- Masa a base de galletas
- 150 gramos de galletas María
- 75 gramos de mantequilla derretida
- 2 cucharadas de azúcar
- 2 cucharadas de licor al gusto
Crema
- 700 gramos de queso crema o ricotta
- 1/3 de taza de azúcar pulverizada
- 4 huevos
- 2 yemas
- 1/2 taza de azúcar
- 2 cucharadas de maicena
- 2 tazas de crema de leche o nata
- 2 cucharaditas de esencia de vainilla
- 3 cucharadas de jugo de limón
- 1/2 taza de pasas maceradas en vino dulce
Para decorar
- 1 taza de crema de leche
- Chispitas de chocolate
- Pasas cubiertas de chocolate
Preparación
Poner en un procesador las galletas y procesarlas hasta que queden reducidas a polvo.
Agregarle, fuera de la procesadora, el azúcar, la mantequilla derretida y el licor. Unir hasta formar una bola.
Forrar con papel aluminio una molde y tapizando el fondo del molde con la masa de galletas con cuidado y ayudándose con el revés de una cuchara. Una vez forrado toda la base, llevar a la nevera para que solidifique.
A parte, batir un poco los huevos junto con el azúcar. Incorporarle, la maicena, la vainilla y el jugo de limón.
Aparte mezclar el queso con la azúcar pulverizada, unir la mezcla de los huevos con el queso y la crema. Mezclar bien todo e incorporar las pasas maceradas.
Forrar la tortera que tiene las galletas por fuera con papel aluminio para que no entre el agua y verter la preparación; colocar en baño María y llevar a horno moderado durante aproximadamente 45 minutos (reponiendo un poco de agua caliente si es necesario).
Cuando esté lista la torta se apaga el horno y se deja una hora más con el horno cerrado. Se retira y se deja fuera del horno una hora más. Entonces se lleva a la nevera y se deja toda la noche para luego desmoldar.
Para la decoración, se bate la crema de leche o nata con una cucharada de azúcar pulverizada hasta que esté cremosa.
Decorar en forma sencilla con manga rizada. Salpicar con las chispitas de chocolate y las pasas recubiertas de chocolate.
Este postre debe mantenerse muy bien frío.