La menstruación no debería ser un impedimento para seguir manteniendo relaciones sexuales de manera habitual. A no ser que te incomode o te provoque algún malestar o dolor, no hay ningún motivo para no practicar el sexo en los días en los que tienes la regla. Es más, en esos días, es probable que incluso disfrutes más y sientas más placer al llegar al orgasmo.
Aunque tener relaciones sexuales durante la regla siga siendo un tema tabú, el deseo sexual de las mujeres aumenta considerablemente en esta fase del ciclo -un 82 por ciento de las mujeres afirma tener relaciones durante la regla, según una encuesta mundial elaborada por Intimina-. En ese estudio, realizado a una muestra representativa de 710 mujeres de nuestro país, casi la mitad de las españolas (44%) tiene mayor deseo sexual durante la menstruación. Entre las ventajas de seguir con tu actividad sexual durante el periodo se encuentra que puede ser un alivio para los cólicos menstruales.
Tener un orgasmo es una buena manera de combatir el dolor menstrual ya que los músculos del útero se contraen cuando llegamos al clímax y al volverse a relajar provocan algo de alivio en el dolor. Eso sí, si bien los orgasmos pueden ayudar a aliviar los dolores de la menstruación, para algunas mujeres el mantener relaciones sexuales con la regla puede resultar más incómodo.
Además, cuando tenemos un orgasmo, nuestro cerebro libera endorfinas, conocida como la hormona de la felicidad, que nos hacen sentir bien incluso en los días en los que podemos estar algo de bajón. Otro buen motivo para seguir con tu rutina sexual es que la menstruación facilita la lubricación, ya que la sangre es un lubricante natural.
Para muchas mujeres, tener sexo durante la menstruación puede ser incluso más placentero que en otros días y esto es debido a los cambios en tu libido a lo largo del ciclo menstrual provocados por las fluctuaciones hormonales. Según un estudio del año 2013 publicado en Cephalalgia, tener sexo durante la regla puede disminuir el dolor de migrañas y cefaleas en algunas mujeres.
No está de más recordar que si mantienes relaciones mientras tienes la regla también puedes quedarte embarazada. Aunque las probabilidades son más bajas, no es imposible. El hecho de quedarse embarazada depende de cuándo ovulas en tu ciclo. El día de la ovulación varía entre mujeres. Solo puedes quedarte embarazada tras tener relaciones sexuales durante la menstruación si ovulas pronto en tu ciclo o si tu menstruación es mucho más larga que los cinco días de media. Así las cosas, deberías usar protección también durante la regla porque además esos días eres más vulnerable a coger una Enfermedad de Transmisión Sexual.
Posturas para disfrutar con la menstruación
Si no te importa la incomodidad que a veces se puede dar estando con la menstruación y tu pareja también está de acuerdo contigo, estas son tres de las mejores posturas sexuales para poder disfrutar del sexo durante la regla, sin correr el riesgo de dañar el cuello del útero:
– El misionero. Se trata de la clásica postura de uno arriba y otro abajo. Al colocarse en posición horizontal, ayuda a que salga menos sangre y, al estar tumbada, no tiene que moverse demasiado ni hacer grandes esfuerzos, por lo que también contribuye a que se escape menos flujo menstrual. Además, no es especialmente profunda, a no ser que se coloquen unos cojines debajo para subir la pelvis y entrelazar sus piernas en las caderas de la pareja.
– La cucharita. Esta postura implica estar tumbada de lado, con las piernas extendidas o ligeramente flexionadas y la pareja se coloca por detrás acoplándose a ella. De esta manera, al estar en posición horizontal, contribuye a que no se escape una gran cantidad de sangre. Esta postura también es poco profunda, cómoda, e ideal si se realiza con movimientos pequeños en los que solo se introduce el glande, estimulando este y la entrada de la vagina.
– La vaquera. Por lo general, todas las posturas que nos permitan controlar el ritmo y la intensidad serán nuestras grandes aliadas y esta es una de ellas. Para esta postura basta con tumbarse boca arriba con las piernas estiradas y que la pareja se siente encima de su pelvis, de rodillas o cuclillas con el tronco bien estirado. Esta posición en la que se está encima, se enfrenta a la ley de la gravedad que hará que la salida del flujo menstrual sea más abundante.
Posturas menos cómodas con la menstruación
– La mariposa. Tumbada boca arriba, sobre una superficie resistente que se encuentre a unos treinta centímetros, aproximadamente, por debajo de la pelvis de la pareja. Esta se coloca de pie frente a ti y te sujeta por debajo para ayudarte a elevar la pelvis y apoyar tus piernas en los hombros. De esta manera, tus omóplatos quedan apoyados en la superficie del objeto en el que se encuentra y, el resto de su espalda, forma una línea recta. Aunque se trate de una postura multiorgásmica y de las que más estimulan, conlleva una penetración muy profunda que podría lastimar el cérvix de la mujer.
– Postura indra. Al igual que en la postura anterior, hay que tumbarse boca arriba. En este caso se flexionan las piernas y se apoyan los pies, tobillo con tobillo, en el pecho de tu pareja que se encuentra de rodillas, con las piernas abiertas y el tronco recto. Se trata de una postura en la que la pareja marca totalmente el ritmo de la penetración que, cuanto mayor sea la inclinación de su cuerpo, más profunda será. Por lo tanto, también puede ser dañina e incómoda para algunas mujeres.
– El perrito. Se crea un soporte de cuatro puntos, apoyando las manos y las rodillas, y la pareja se sitúa de rodillas por detrás. Una vez más, hablamos de una posición que conlleva una penetración bastante profunda y, por tanto, el cuello del útero es más vulnerable.