Cortar las orejas de los perros es una práctica bastante común como la de mutilar la cola. Originariamente se hacía con los perros de pelea, para evitar zonas vulnerables frente a sus atacantes; sin embargo, con el paso del tiempo se volvió una moda y el único fin es estético.
Cabe acotar que, es más factible que se realice en algunas razas de canes, y que no tiene ninguna ventaja para el animal.
Expertos señalan que en realidad, se trata de un acto de mutilación que no aporta ningún beneficio a la mascota.
Incluso, en muchos países se ha prohibido porque está comprobado que es un proceso doloroso y, hasta implica riesgos para su salud.
El procedimiento afecta el pabellón auricular del animal y esto puede disminuir la audición y los movimientos del can, además, de volverse más propenso a sufrir de otitis.
Procedimiento
En ocasiones el corte se realiza sin anestesia, no obstante, algunos veterinarios optan por utilizarla para aliviar el dolor del momento.
Pero, es importante acotar que, no todos los animales toleran la anestesia, por lo que se corre el riesgo de que la mascota tenga una reacción alérgica o muera.
Recuperación
Si decides realizar este procedimiento se recomienda hacerlo guiada siempre por un veterinario que te mantenga al tanto de cuál es la mejor alternativa y cómo se debe cuidar luego del corte.
Una vez realizado, es imprescindible cuidar de la mascota en este proceso de recuperación, porque suele convertirse en una recuperación lenta, de difícil cicatrización y que deja al perro más vulnerable a infecciones.
Debes tener en cuenta que la recuperación varía de un perro a otro, y va a depender de la edad del animal, de sus condiciones físicas y de los cuidados recibidos.
Consecuencias
Además de las ya mencionadas, un perro al cual se le cortan las orejas sentirá mucho dolor cuando se realiza el corte, y disminuirá su capacidad de expresión.
Recordemos que los perros manifiestan sus estados anímicos a través de un lenguaje corporal que es evidente en la cola y sus orejas; por tanto, si se le cortan las orejas, se inhibe la comunicación con su amo, por ejemplo.