El pasado viernes, el principal asesor de política exterior del Gobierno estadounidense, Jake Sullivan, afirmó que el Gobierno del presidente estadounidense, Joe Biden, está listo para dialogar con Rusia sin condiciones sobre un futuro marco de control de armas nucleares.
«Es una declaración importante y positiva del señor Sullivan. Por supuesto, esperamos que se reafirme en la práctica con pasos por medio de los canales diplomáticos. Después ya podremos estudiar los formatos de diálogo propuestos», afirmó en rueda de prensa el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov.
Peskov recalcó que «Rusia continúa abierta al diálogo y lo consideramos de extrema importancia, pero es necesario comprender primero en qué radica esta propuesta».
Diálogo sin condiciones
«A nuestros países no les interesa embarcarse en una competencia en fuerzas nucleares estratégicas», declaró, al señalar que «en lugar de esperar a resolver todas nuestras diferencias bilaterales, EE. UU. buscará involucrar a Rusia» en proyectos «para gestionar riesgos nucleares y desarrollar un acuerdo posterior a 2026”.
Sin embargo, señaló que Estados Unidos mantendrá las contramedidas anunciadas a la decisión rusa de suspender el cumplimiento del START III, en particular, el cese del envío de actualizaciones de datos sobre instalaciones y fuerzas nucleares.
Washington tampoco permitirá actividades de inspección en su territorio y revocará los visados de los inspectores adscritos al tratado y de los miembros de las tripulaciones de dicha inspección, y denegará los visados que están en marcha.
Del mismo modo revocará el permiso diplomático que tienen los aviones de inspección rusos y no facilitará información telemétrica sobre sus lanzaderas.
Tira y afloja diplomático
A mediados de mayo Rusia ya rechazó la posibilidad de publicar el número de ojivas nucleares tras denunciar también el Tratado de Fuerzas Armadas Convencionales en Europa.
El presidente ruso, Vladímir Putin, anunció el 21 de febrero la suspensión del cumplimiento por parte de su país del START III, aunque matizó que Rusia no abandona el pacto, sino que se limita a suspenderlo por culpa de EE. UU. y la actitud hostil de Washington, que apoya con armamento y financiación a Ucrania.
Notiespartano/DW.com