Cara Delevingne no estaría atravesando uno de sus mejores momentos. La popular modelo británica, de 30 años, fue protagonista de unas preocupantes escenas en el Aeropuerto Van Nuys de Los Angeles, California (EE.UU.), donde algunos viajeros pudieron verla en un estado de suma confusión y visiblemente desmejorada.
Ataviada con un pantalón de chándal, una camiseta negra con la imagen de Britney Spears, con vistosos calcetines amarillos, sin zapatos, con el pelo despeinado y sin asear; la modelo se paseó por el aparcamiento del aeropuerto hablando por teléfono, fumando y haciendo movimientos bruscos y erráticos que fueron captados por las cámaras y que han hecho que salten las alarmas con respecto a lo que podría estar pasando.
Estamos terriblemente preocupados. La situación se ha ido gestando desde hace semanas, la familia de Cara está involucrada», aseguraba una fuente cercana al entorno de la modelo al diario británico The Sun el pasado miércoles, asegurando que ya se está hablando de proceder con algún tipo de intervención para poder proporcionarle la ayuda que pueda necesitar para recuperarse: «Sus amigos están preocupados por ella en general tras un comportamiento errático, pero tiene un buen grupo a su alrededor».