Polonia conmemora este miércoles (19.04.2023) los 80 años del levantamiento del gueto de Varsovia, donde un puñado de combatientes judíos atacaron a los nazis prefiriendo morir con las armas en la mano que en un campo de exterminio, con conciertos, encuentros y ceremonias solemnes, en presencia de los presidentes de Israel y Alemania,
El levantamiento, del 19 de abril al 16 de mayo de 1943, fue el mayor hecho conocido de resistencia urbana judía contra los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Las sirenas municipales y las campanas de las iglesias de Varsovia repicarán al mediodía para conmemorar a los insurgentes muertos en este barrio, aniquilado por los alemanes.
El presidente de Israel, Isaac Herzog, el alemán, Frank-Walter Steinmeier, y el polaco Andrzej Duda harán declaraciones ante el monumento a los Héroes del Gueto. Luego irán juntos a una sinagoga. En toda la ciudad, como en años pasados, más de tres mil voluntarios repartirán narcisos de papel, que la gente podrá lucir en sus chaquetas y abrigos.
Los narcisos que recuerdan a la estrella judía
Un gesto en recuerdo de Marek Edelman, el último comandante del alzamiento, fallecido en 2009, que tenía la costumbre de marcar este aniversario depositando en solitario un ramo de narcisos amarillos al pie del memorial de los Héroes del Gueto. Por el color y la forma, los narcisos de papel recuerdan la estrella amarilla de David que los judíos europeos debían llevar, por imposición de los nazis.
Este año, la tradición se observará en otras ciudades de Polonia. «Repartiremos juntos 450.000 flores de papel. El número simboliza las mujeres y hombres judíos encerrados en el gueto de Varsovia en el momento de mayor sobrepoblación, la primavera de 1941», declaró a la prensa Zofia Bojanczyk, coordinadora del proyecto «Narcisos».
Un año después de invadir Polonia en 1939, los nazis delimitaron una zona en Varsovia para hacinar en tres kilómetros cuadrados a cerca de medio millón de judíos. Todo ello para exterminarlos a base de hambre y enfermedades, y deportar a más de 300.000 a las cámaras de gas del campo de Treblinka, a 80 km al este de la capital polaca. El gueto de Varsovia llegó a ser el más importante de todos durante la Segunda Guerra Mundial. En el momento de la insurrección, protagonizada por cientos de combatientes judíos, unos 50.000 civiles vivían escondidos en sótanos y búnkeres del gueto. Los alemanes terminaron reprimiendo sangrientamente la revuelta e incendiaron el barrio, que quedó reducido a un campo de ruinas.
Notiespartano