El pollo con salsa de piña tiene un exquisito toque tropical y sutilmente agridulce. Es un plato sofisticado para lucirse en una cena especial. Aunque existen miles de recetas con pollo, siempre surge una nueva, fusionando sabores que parecen opuestos y luego resultan un manjar. La grasa que va soltando el pollo se compensa con el toque ácido de la piña, formando una curiosa combinación.
Ingredientes:
- 3 pechugas de pollo
- 4 rodajas de piña (de lata)
- 2 dientes de ajo
- 1 vaso de vino blanco
- 1 vaso del almíbar de la piña
- 3 cucharadas de salsa de soja
- 3 cucharadas de miel
- 1 puñado de nueces picadas
- 1 cucharada de harina de maíz instantánea
- 3 cucharadas de mantequilla
Como preparar pollo con salsa de piña:
- Derretir la mantequilla en una sartén.
- Cuando comience a burbujear, dorar las rodajas de piña por ambos lados. Reservar.
- Cortar las pechugas de pollo a la mitad. Dorar también por ambos lados en la misma mantequilla que se usó con las piñas.
- Raspar el fondo de cocción con cuchara de madera, así se evita que la mantequilla y el azúcar que desprendió la piña se queme.
- Picar los ajos finamente y agregar a la sartén.
- Remover para que se doren.
- Añadir el vino, el almíbar de la piña y la salsa de soja.
- Cocinar hasta que la salsa rompa el hervor.
- Bajar el fuego y continuar la cocción hasta que el pollo esté tierno.
- Retirar el pollo y reservar en un plato.
- Disolver la harina de maíz en un poco de agua y añadir a la salsa junto con la miel. Mezclar bien y cocinar a fuego bajo durante cinco a ocho minutos hasta que la salsa espese, y se vea brillante y homogénea. Añadir las nueces picadas.
- Volver a colocar el pollo en la sartén, para que se caliente.