Una pareja de zulianos murió cuando intentaba cruzar el caudaloso río Bravo rumbo a los Estados Unidos. La mujer fue arrastrada por la corriente del afluente y el hombre intentó salvarla, pero también desapareció en las aguas.
Identificados como Angie Madelaine Gutiérrez Aguilar y José Gregorio Flórez Salcedo, este último de 30 años, venezolanos nativos de Maracaibo, estado Zulia, que perdieron la vida en el río situado en la frontera entre México y EEUU, refiere El Diario.
La pareja había llegado a Colombia en busca de un mejor futuro. En Maracaibo, José Gregorio se desempeñaba como músico mediante la salsa, tocaba el timbal. Fue en 2018 cuando el joven y su compañera decidieron irse hasta Cartagena, donde convivieron durante cuatro años.
Este año, Angie y su pareja optaron por aventurarse a dejar Cartagena y buscar un mejor porvenir en Norteamérica.
Víctor Flórez, hermano menor del infortunado, relató a El Diario que los venezolanos decidieron migrar a Estados Unidos porque José Gregorio tenía una tía que los podía recibir en ese país.
Fue el pasado 18 de mayo cuando salieron de la Terminal de Transportes de Cartagena rumbo a la frontera con Panamá.
De Panamá llegaron a Honduras y de allí a México. Iban con un grupo de personas de diferentes lugares, pasaron selvas, caminaron mucho hasta llegar al norte de México. Los ayudaban los llamados «coyotes», contó una familiar de Flórez a El Universal.
Desgracia en el río Bravo
La pareja logró un permiso para transitar por México de manera legal. El pasado 24 de junio, a las 7:30 de la mañana, Angie y José Gregorio llegaron al río junto a otros grupos de migrantes.
Iban atravesando el «Bravo» de tres en tres. Cuando le tocó el turno a Gutiérrez, abrieron las compuertas de una represa cercana y el afluente se creció. La mujer resbaló al cruzar unas piedras y la corriente la arrastró.
Cuando Flórez vio que el agua se «tragaba» a su amada, él se lanzó al río para salvarla. Sin embargo, la corriente también se lo llevó.
Los familiares perdieron contacto con ellos a finales del mes de junio y fue el 16 de julio cuando supieron, a través de unos «coyotes», sobre el fallecimiento de la pareja. Incluso pensaron que estaban detenidos, añade El Diario.
El cuerpo de José Gregorio lo localizaron en la población de Piedras Negras, en México, y el de Angie sigue desaparecido, informa El Universal.
El cadáver de Flórez permanece en una morgue mexicana y asegura la familia que cobran 2.000 dólares para repatriarlo.
«Llamamos a la Embajada y no contestan, nadie nos ayuda y no tenemos ese dinero. Queremos que se pongan la mano en el corazón, él no merece estar en una fosa común”, cuestionó la pariente del zuliano.
Notiespartano/ElUniversal