El secretario general de la ONU, António Guterres, se dirigió este viernes a los líderes del grupo G7 con una declaración que llama a reformar el Consejo de Seguridad, el órgano encargado de mantener la paz y la seguridad internacionales, para adaptarlo al nuevo panorama geopolítico.
Guterres señaló que el Consejo de Seguridad refleja las relaciones de poder de 1945, cuando se creó tras la Segunda Guerra Mundial con cinco miembros permanentes (China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Rusia) que tienen derecho a veto sobre cualquier resolución.
«Muchas cosas han cambiado desde entonces. Es hora de reformar el Consejo de Seguridad para que sea más representativo, más transparente y más eficaz», dijo Guterres, quien abogó por una mayor participación de los países en desarrollo y emergentes en la toma de decisiones.
El secretario general de la ONU recordó que el Consejo de Seguridad ha mostrado sus limitaciones en varios conflictos, como el de Ucrania, donde Rusia es juez y parte, o el de Siria, donde se han vetado más de una docena de resoluciones para poner fin a la guerra.
El Consejo de Seguridad debe ser capaz de responder a las amenazas actuales y futuras
«El Consejo de Seguridad debe ser capaz de responder a las amenazas actuales y futuras, como la pandemia del covid-19, la crisis climática, el terrorismo, las armas nucleares o el ciberespacio», afirmó Guterres, quien pidió a los líderes del G7 que apoyen su iniciativa de reforma.
La Asamblea General de la ONU está analizando esta semana la reforma del Consejo de Seguridad, un debate recurrente desde hace décadas que no ha logrado avances significativos por la falta de consenso entre los Estados miembros.
Existen diversas propuestas para ampliar el número de miembros permanentes o no permanentes del Consejo de Seguridad, así como para limitar o eliminar el uso del veto. Sin embargo, cualquier cambio requiere el apoyo de dos tercios de los 193 países que integran la ONU y el aval de los cinco miembros permanentes actuales.
Notiespartano/ElImpulso