La producción de crudo por parte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), volvió a caer en el mes de julio un 3% después de contabilizar 27.310 millones de barriles diarios (mbd), 836.000 menos que en junio, según señalan las estimaciones publicadas este jueves por la organización petrolera con sede en Viena y recoge EFE.
La cifras del informe mensual de la OPEP revelan que la marcada caída se debió al fuerte recorte que aplicó Arabia Saudí a su bombeo y que es uno de los principales factores que ha impulsado el encarecimiento del «oro negro» en julio y sigue haciéndolo este mes.
En su promedio mensual, la cotización del barril de Brent, de referencia para Europa, fue en julio de 80,16 dólares, lo que supone un aumento de más de 5 dólares o casi un 7% respecto al promedio del mes anterior, se indica en el documento. Aún mayor, del 7,8% (5,87 dólares) y del 8,2% (5,76 dólares), fueron las subidas del barril referencial de la OPEP y del petróleo intermedio de Texas (WTI, referente en Estados Unidos), que se vendieron a 81,06 y 76,03 dólares de media, respectivamente.
El precio del barril no deja de subir
La sostenida tendencia alcista ha proseguido en las últimas semanas: el WTI superaba hoy los 83 dólares, mientras que el Brent está a mas de 87 y el barril de la OPEP roza los 90 dólares. Según los datos del informe basados en «fuentes secundarias», es decir, en las estimaciones de institutos independientes, Arabia Saudí bombeó en julio 9,02 mbd, 968.000 bd o casi un 10 % menos que en junio, cifras que difieren muy poco de las oficiales transmitidas por el reino wahabí.
Con ello, Riad ha cumplido casi al cien por cien con su decisión de aplicar en julio un recorte «adicional y voluntario» de un millón de bd para apuntalar los precios, medida que ya ha prorrogado a agosto y septiembre. Ese gran recorte saudí, sumado al descenso de las extracciones libias (-52.000 bd), compensó con creces los aumentos de otros socios, como Irán (+68.000 bd), Angola (+56.000 bd) y Venezuela (+37.000 bd).
Reducción de bombeo
Aparte del recorto extra saudí y la promesa rusa de bajar también sus exportaciones entre julio y septiembre, la alianza OPEP+, formada por los trece socios de la OPEP y diez países aliados, mantiene vigentes unas reducciones del bombeo que suman 3,6 mbd, cerca del 3,6% de la producción mundial de crudo. Fueron adoptadas en octubre y abril pasado, pero solo comenzaron a surtir el efecto deseado de subir los precios a mediados de año.
«A pesar del elevado nivel actual de operaciones de refinería, las existencias de gasolina y destilados medios se mantienen muy por debajo del nivel medio de los últimos cinco años»
El mayor consumo de gasolina por el aumento de la movilidad durante las vacaciones estivales en el hemisferio norte y la demanda de combustible en Oriente Medio contribuyeron en julio a encarecer el petróleo, según los expertos de la OPEP.
Además, están bajas las reservas de productos petrolíferos almacenadas en las naciones consumidoras, lo que constituye otro factor alcista. «A pesar del elevado nivel actual de operaciones de refinería, las existencias de gasolina y destilados medios se mantienen muy por debajo del nivel medio de los últimos cinco años en EE.UU. y Europa», señalan.
«De cara al futuro», la OPEP considera que las tareas de mantenimiento de las refinerías «y las posibles interrupciones de la producción durante la temporada de huracanes de Estados Unidos podrían restringir el mercado de la cuenca del Atlántico».
Y deja claro que estas perspectivas, unidas al cierre de grifos de la OPEP+, ayudarán a mantener elevados los «petroprecios», que pese a su fuerte subida están aún por debajo del nivel de hace un año, cuando superaban los 100 dólares/barril. Respecto a la demanda mundial de «oro negro», el informe la cifra en una media de 102,01 mbd en 2023 y de 104,25 mbd en 2024, sin cambios respecto a los pronósticos hechos hace un mes.
Notiespartano/LaInformacion