Nueve soldados israelíes murieron en Gaza ayer lunes, en uno de los días con más militares muertos desde el inicio de su ofensiva terrestre sobre la Franja, mientras el Ejército entra en una nueva fase de la guerra y sigue ampliando sus ataques en la zona sur del enclave.
Las tropas actualizaron hoy la cifra de sus efectivos muertos, que ascienden a un total de 185 desde el inicio de la invasión por tierra, mientras que los soldados heridos desde el estallido de la guerra el pasado 7 de octubre rozan los 2.300, 382 de ellos graves.
Entre los nueve soldados muertos ayer, seis fallecieron por la explosión de municiones colocadas en un túnel que iban a hacer estallar, en el campo de refugiados de Al Burej, en el centro de Gaza.
Según una primera investigación del Ejército, la explosión se debió al disparo de un tanque.
Según las autoridades israelíes, el Ejército ha completado el desmantelamiento de la infraestructura militar de Hamás en el norte de la Franja, y ahora se centra en el centro y sur de la Franja, en una guerra que dura ya 96 días y que se prevé que se prolongue en 2024.
El ministro de defensa de Israel, Yoav Gallant, informó hoy en su reunión con el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, sobre «los cambios de tácticas de combate en la zona norte de la Franja, que permitirán a Israel alcanzar sus objetivos de guerra».
A su vez, reiteró que las operaciones militares en Jan Yunis «se intensificarán y continuarán» hasta que Israel encuentre los líderes de Hamás y logre liberar a los rehenes que siguen cautivos en Gaza.
Notiespartano/EFE