Un grupo de investigadores de la Universidad de Aarhus (Dinamarca) han desarrollado una molécula capaz de imitar una respuesta metabólica al ejercicio regular y extenuante y al ayuno, aumentando los niveles de lactato y cetonas en la sangre, que se asocian a varios beneficios para la salud.
El estudio, que acaba de publicarse en la revista científica ‘Journal of Agricultural and Food Chemistry’, indica que la molécula tiene el mismo efecto que una carrera de 10 kilómetros en ayunas. «Hemos desarrollado una molécula capaz de imitar la respuesta metabólica natural del organismo al ejercicio extenuante y al ayuno. En la práctica, la molécula lleva al cuerpo a un estado metabólico equivalente a correr 10 kilómetros a gran velocidad con el estómago vacío», ha explicado el profesor Thomas Poulsen, del Departamento de Química de la Universidad de Aarhusy uno de los principales investigadores del estudio.
«Cuando aumentan los niveles de lactato y cetonas en la sangre, aumenta la producción de una hormona que suprime el apetito y disminuye el nivel de ácidos grasos libres en la sangre. Esto tiene una serie de beneficios para la salud, por ejemplo la reducción del riesgo de desarrollar síndrome metabólico», ha añadido Poulsen.
Según el profesor, no es posible conseguir el mismo efecto sólo con la dieta, ya que el lactato y las cetonas, aunque se producen de forma natural, no pueden consumirse en las cantidades necesarias sin subproductos indeseables como el ácido y la sal. Aquí es donde entra en juego la nueva molécula, llamada LaKe.
Otras declaraciones
El desarrollo de LaKe es el resultado de varios años de colaboración en investigación entre Thomas Poulsen, el profesor Mogens Johannsen, del Departamento de Medicina Forense, y el médico jefe y profesor Niels Moller, del Departamento de Medicina Clínica y Centro Steno de Diabetes de Aarhus.
Los tres han investigado el metabolismo desde distintos ángulos, y todos sabían ya por estudios propios y ajenos que el lactato y las cetonas tienen efectos beneficiosos. Tardaron tres años en lograr la fusión química de lactato y cetonas, sin los dañinos «compañeros de viaje» en forma de sal y ácido.
«En cierto modo, no nos sorprende el efecto, porque estamos combinando sustancias bien conocidas. La innovación es que ahora hemos creado una molécula que nos permite controlar artificialmente las cantidades de lactato y cetonas de forma segura», ha afirmado Thomas Poulsen.
Notiespartano/800noticias