El periodista estadounidense Grant Wahl, de 48 años, ha muerto este viernes mientras trabajaba en el Mundial de fútbol en Qatar.
Wahl, uno de los reporteros deportivos más célebres de EEUU, se desplomó en la zona de prensa mientras cubría para la CBS los cuartos de final Argentina-Países Bajos. Fue trasladado a un hospital cercano, pero no pudieron reanimarle. El periodista español Rafael Cores, residente en Estados Unidos, estaba a su lado durante el partido. “Estoy en shock. Solo unos minutos antes se reía de un chiste que vimos en Twitter”, ha expresado en redes sociales. De hecho, Wahl escribió varios tuits durante el encuentro.
Hace unos días, Wahl había informado de que se había acercado a la clínica que atiende a los periodistas desplazados a Qatar porque no se encontraba bien. Le dijeron que probablemente tenía una bronquitis. “Tres semanas con poco sueño, mucho estrés y trabajo pueden tener este efecto sobre nosotros”, comentó con sus seguidores.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, ha enviado un mensaje de pésame a su esposa, Céline, una reconocida epidemióloga, su familia y amigos “en nombre de toda la comunidad del fútbol”. Hace unos días, la FIFA reconoció su trabajo al cubrir ocho mundiales consecutivos desde 1994 y el exfutbolista brasileño Ronaldo le entregó un premio. “Su amor por el fútbol era inmenso”, ha añadido Infantino. La federación de fútbol de EEUU también ha enviado un comunicado en el que expresa su pésame y alaba su defensa de los derechos humanos: “Estamos rotos”.
El pasado 21 de noviembre, Wahl explicó que miembros del equipo de seguridad del Mundial le habían retenido durante 25 minutos antes de entrar en el estadio para ver el partido de Estados Unidos contra Gales por llevar una camiseta arcoirirs en apoyo a los derechos del colectivo LGTBi.
La homosexualidad es considerada un delito en Qatar, donde rige la sharía (ley islámica) y está penada con cárcel. “Me dijeron que tenía que cambiarme de camiseta porque no estaba permitida y era ‘política’. Lo tuiteé y me quitaron el móvil”. Posteriormente le dejaron entrar y otro miembro de seguridad le pidió disculpas. “Me dijo que solo trataban de protegerme de fans que podían hacerme daño por llevar esa camiseta”.
Notiespartano/ElPaís