Pese a la apertura de los puentes internacionales, primero para paso de peatones y, más recientemente, para el paso de vehículos no ha mermado el flujo de mercancías por las más de 250 trochas que conectan el Norte de Santander con el estado Táchira.
Las estructuras y puentes establecidos sobre el río Táchira para el paso de mercancía vía trocha siguen vigentes, así como la dinámica comercial alrededor de estos pasos ilegales y, según los pobladores de la frontera, esta situación no cambiará en el corto plazo por dos razones fundamentales: los controles y la matraca, reseñó La Prensa Táchira.
Ciudadanos y y comerciantes resaltan que en el paso por las trochas no sólo hay muchos intereses tanto de grupos al margen de la ley como de mismas autoridades a ambos lados de la frontera, sino que la economía que se genera alrededor del paso ilegal de la mercancía deja grandes ganancias, especialmente en grandes cantidades, pues el ahorro por los denominados «caminos verdes» no tiene parangón al poder saltar los trámites aduanales y la matraca de los organismos de seguridad.
Los ciudadanos consultados estiman que sobre los puentes internacionales se apostan más de cinco organismos militares y aduanales y que cada uno exige «su porcentaje» para permitir el paso de las mercancías, siendo así que deben hacer varios pagos menores que, sumados, dan grandes cantidades, mientras que por las trochas hacen un solo pago y listo.
Notiespartano/800Noticias