A cinco años después de su boda en la capilla de San Jorge, dentro del Castillo de Windsor, el 19 de mayo de 2018, algunos periódicos británicos sugieren que el matrimonio de los duques de Sussex, Meghan y Harry, está al borde del abismo, especulando con la posibilidad de que quieran divorciarse a causa de la no celebración de su aniversario ni haber mostrado ningún gesto amoroso desde hace tiempo.
Pero no solo eso, se rumorea también que la Familia Real británica estaría presionando a Harry para que termine de tomar la decisión de divorciarse de Meghan y pueda regresar al Reino Unido, su verdadero hogar.Uno de los momentos que el Daily Mail destaca para justificar el distanciamiento de la pareja fue «la cobra» (no beso) que Markle le hizo a su esposo en el «kissing time» del partido de la NBA al que asistieron el pasado 24 de abril. Podría ser pura especulación, sin embargo, este mismo tabloide publicó recientemente que Harry tenía una habitación reservada para él en una gran cadena hotelera en Montecito (donde vive con su esposa y sus dos hijos), donde en ocasiones se queda solo para escapar de su rutina familiar.
Por otro lado, Tom Bower, periodista y biógrafo de la monarquía, ha insinuado que la idea de separarse de la pareja está más avanzada de lo que muchos piensan. «Hay mucha gente en Londres que opina que Meghan se está cansando de Harry», ha puntualizado, llegando a decir que ya hacen incluso vida por separado.
The Telegraph, además, cree que el ambiente entre ellos está muy viciado y que ya han comenzado a distanciarse el uno del otro, según palabras del maquillador y amigo de la exactriz, quien sostenía recientemente que el príncipe Harry podría estar sufriendo algo de nostalgia por su anterior vida. «Ha encontrado definitivamente su sitio y está muy asentado en California, pero echa de menos su hogar», aseguraba.