La Unión Europea necesita 481.000 millones de euros en inversiones adicionales cada año hasta 2030 para cumplir sus objetivos a largo plazo de transición ecológica y digital, según un informe publicado este miércoles por el centro de estudios Bruegel.
«Cubrir este déficit, lo cual es necesario si la UE quiere lograr sus objetivos estratégicos, dependerá de un uso eficiente de los recursos públicos y de la movilización de inversión privada», escriben las autoras del informe, publicado el mismo día en que la Comisión Europea ha presentado su estrategia para mejorar la seguridad económica del bloque.
De acuerdo con el mismo, este montante de inversiones sería necesario ya solo para acometer la transición digital y climática, por la que la UE quiere reducir en un 55 % sus emisiones de dióxido de carbono para final de la década en comparación con los niveles de 1990, así como para mejorar su resiliencia.
El estudio, que pasa revista al diferentes programas europeos destinados a inversiones, destaca que ha habido «falta de continuidad» en el modo en que la UE ha llevado a cabo sus inversiones y que los programas han sido «finitos y esporádicos, con diferentes fuentes de financiación y objetivos que se han solapado».
Los autores proponen crear un fondo para Inversiones Estratégicas Europeas que sea específico y permanente para esta tarea y sugieren que en primera instancia podría venir financiado por el presupuestario plurianual de la UE, aunque el «gestor natural para tal fondo» sería a su juicio el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
Papel del BEI
«Creemos que el BEI puede desempeñar un papel crucial para identificar, elegir, financiar y monitorizar inversiones estratégicas en la UE», señalan.
Entre las inversiones que deberían considerarse estratégicas mencionan, por ejemplo, las infraestructuras energéticas y de conectividad transfronterizas o las instalaciones para impulsar la innovación y la resiliencia a nivel de la UE, y subrayan que los proyectos «deberían evaluarse en función de la medida en que proporcionen valor añadido europeo y contribuyan a los objetivos estratégicos» del bloque.
Los autores llaman también a avanzar en la creación de nuevos recursos propios que nutran el presupuesto de la UE para devolver el principal y los intereses de la deuda emitida para financiar el fondo de recuperación pospandemia que, más adelante, podrían ser también nuevos «flujos de financiación» para el propuesto del fondo de Inversiones Estratégicas Europeas.
El comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, recordó ayer que Bruselas calcula que para financiar la transición ecológica y digital harán falta 650.000 millones de euros en inversiones adicionales – públicas y privadas- cada año hasta 2030, por lo que instó a reflexionar ya sobre cómo financiarlas a partir de 2027 y a renovar el programa de inversiones europeo InvestEU.
Notiespartano/EFE