El Complejo de Piscinas “Oliver Núñez” de Guatamare en los 9 años de los gobernadores Carlos Mata Figueroa y Alfredo Díaz se volvió trizas. Todo se volvió nada y ninguno de los dos mandatarios le metió las manos para conservarlo en condiciones medias de funcionamiento. Eso indica que dejaron morir esas bellas instalaciones que terminaron molidas por la inercia de los gobernantes.
Le tocó a Morel llegar a la Gobernación a rehabilitar una cantidad de infraestructuras que quedaron prácticamente en el suelo después de la pandemia y cuando parecía casi imposible rescatar estas instalaciones apareció de nuevo Morel en el mando para ordenar la rehabilitación de tan importante Complejo Deportivo. La tarea no fue fácil porque el gobierno de Morel asumió el poder en el 2022 con un presupuesto reconducido que además llegó con 500 mil dólares menos para hacer más compleja la gobernanza.
Es por esa razón que la gente no se explica cómo los anteriores gobernantes nada hicieron por Nueva Esparta y ni siquiera una obra tuvieron para mostrarle a Nueva Esparta y menos el Protector Dante que fue pura bulla y nada logró hacer para justificar la confianza del Presidente Maduro. Por ese motivo los neoespartanos ven con asombro como en este momento el roblero estirando los recursos continúa realizando un gobierno quirúrgico que le muestra ante la gente como un gerente de altos quilates.
Haber recuperado los vagones del Tren de la Salud y más de 100 vehículos del parque automotor es una hazaña sin precedentes en gobierno alguno, pues tener un mando sin vehículos es mortal para cualquier gestión y de una vez empezó a dotar las distintas direcciones que quedaron destruidas en manos de dos gobernantes maulas que nada hicieron por Nueva Esparta.
El reto del Complejo de Piscinas “Oliver Núñez” lo asumió Morel Rodríguez con firmeza y una vez rehabilitados varios centros asistenciales y el Distribuidor de Macho Muerto le entró esta gestión con coraje para cerrar el mes 7 con una obra monumental que muestra el progreso de Nueva Esparta a pasos agigantados.
Tenía Morel que comprar e instalar tres bombas de filtración nuevas con sistema de uso alterno automatizado, comprar e instalar 2 bombas de espumadera (Sirven para la basura en suspensión o flotante), Cambio de arena de filtrado de los 3 filtros más reparación o reposición de toda la tubería, Recuperación de la cerámica y careteo de las dos piscinas, colocación de hidroneumático para bombeo continuo del servicio de agua en los baños, duchas y cantina, recuperación de baños y duchas, instalación de lockers para las pertenencias de los nadadores, instalaciones de sillas en las tribunas, alumbrado led en todas las instalaciones, instalación de carrileras nuevas, mejoramiento y actualización de tacos de madera, colocación del sistema de seguridad (cerco eléctrico, cámaras de video y vigilancia las 24 horas del día).
Acaso los dos gobernantes anteriores no pudieron cristalizar esa propuesta para beneficiar a los margariteños y cochenses. No se ocuparon del mantenimiento y esa obra emblemática de la democracia empezó a venirse al suelo ante los ojos de los margariteños. Por ese motivo empiezan a zapatear los representantes de los opositores que no encuentran argumentos para enfrentar a Morel en el campo de batalla. Y es que ante esa gestión monumental vuelen los infundios y rumores alocados que no le dejan hueso sano a los enemigos de una gestión que lleva rumbo seguro y buen viento de cola.
Los gobernantes que no tuvieron capacidad para realizar gestiones exitosas son los primeros en alzar su voz para quejarse y lanzar alaridos de muerte en señal que asimilaron el castigo propinado por una gobernanza que los arrincona y los pone contra la pared. Pero es la gente la que valora las obras y este Complejo de Piscinas que ahora son parte de las piletas olímpicas del país son una realidad rehabilitada en tiempos de crisis económica. Esa tarea de la gobernanza tiene grandes méritos que abren las puertas del futuro atlético a muchas generaciones que aprovecharán de esta obra que constituye un gran aporte a la natación margariteña.
Y es dónde viene la pregunta, ¿por qué no lo hicieron los gobernantes anteriores?
Ante esa Lección de Guatamare solo queda entender que la gobernanza es una materia obligada para los grandes gerentes de la cosa pública que hacen magia con los recursos del Estado para devolverle a la gente lo que les corresponde. Ahora la tarea es de los ciudadanos y corresponde a la gente de la natación hacer el trabajo ciudadano para preservar las piletas. Debe salir un líder natural como mi amigo Raimundo Encinas “el Doc” para tomar el control de un grupo de nadadores y dirigentes de la natación para evitar que de nuevo se convierta el Complejo de Piscinas “Oliver Núñez” en un espacio para los sancochos, las parrillas y las verbenas populares de las barriadas del Vicente Marcano.
Ahí queda la Lección de Morel como un ejemplo de gobernanza en tiempos de crisis y como muestra que cuando se quiere se puede. Esa es la razón de un gobernante y le demuestra Morel a los mandatarios que el poder es para ejercerlo y no para perder el tiempo en actos protocolares que nada le resultan al pueblo.
Encíclica/ManuelAvila