La administración militar de Jersón anunció hoy un toque de queda inédito de 58 horas que comenzará en la ciudad el viernes 5 de mayo a las ocho de la tarde y se extenderá de forma ininterrumpida hasta el lunes 8 de mayo a las seis de la mañana.
El anuncio de la medida coincide con los preparativos ucranianos para su esperada contraofensiva militar para recuperar territorios ocupados por Rusia en el este y el sur del país, donde las fuerzas rusas controlan la parte de la provincia de Jersón que queda en la orilla oriental del río Dnipro.
«Durante estas 58 horas está prohibido estar y moverse por las calles de la ciudad. La ciudad también estará cerrada para entradas y salidas», dijo el jefe militar de la provincia de Jersón, Oleksandr Prokudin.
El jefe militar pidió a los vecinos que hagan acopio de medicinas y alimentos y explicó que «estas restricciones temporales son necesarias para que los agentes de las fuerzas del orden hagan su trabajo sin poner en peligro» a los habitantes.