El ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, prometió este martes una «investigación exhaustiva y profesional» sobre las circunstancias del ataque contra un convoy de ayuda humanitaria de la organización World Center Kitchen (WCK), en el que murieron anoche siete de sus empleados.
«El ministro Gallant se refirió a la naturaleza trágica del incidente y enfatizó la importancia de realizar una investigación exhaustiva y profesional, a la que seguirá la implementación de las lecciones aprendidas», indicó un comunicado de Defensa sobre la reunión del ministro con altos mandos militares.
Gallant mantuvo hoy una reunión para una «evaluación de la situación operativa» junto con el Jefe del Estado Mayor del Ejército, el teniente general Herzi Halevi, y altos funcionarios del establecimiento de defensa.
«Destaco el importante trabajo realizado por las organizaciones de ayuda internacional, así como el compromiso de Israel de trabajar estrechamente con países y organizaciones socios y facilitar la distribución de ayuda humanitaria», indicó Gallant.
Un dron israelí llegó a disparar tres veces contra un convoy de WCK en la ciudad de Deir al Balah, en el centro del enclave, según información el diario liberal israelí Haaretz, a pesar de que los coches estaban claramente marcados con el logotipo de la organización, ataque en el que murieron cuatro extranjeros y tres palestinos.
El ministro reconoció la importancia de «fortalecer los mecanismos de coordinación con socios clave», como las agencias humanitarias encargadas del reparto de ayuda; e instruyó al estamento de Defensa a «establecer un equipo profesional que investigue de inmediato las circunstancias del incidente».
También ordenó abrir una «sala de situación conjunta», una plataforma que permita la coordinación entre el Comando Sur de las Fuerzas de Defensa de Israel y las organizaciones internacionales con respecto a la distribución de ayuda; así como apoyar los mecanismos de distribución con «recursos apropiados».
Continúan las investigaciones
El ministro se comprometió a informar a las organizaciones internacionales y a los socios sobre los detalles del incidente, y a mantener con ellas una «línea de comunicación abierta y transparente».
Las investigaciones por parte del ejército israelí continúa lo sucedido pero el primer ministro, Benjamín Netanyahu, ya ha admitido la muerte de trabajadores humanitarios por un ataque «no intencionado» de las fuerzas del país, aunque sin citar al grupo.
Aunque no hay conclusiones oficiales, el Ejército encargó hoy una investigación independiente al Mecanismo de Investigación y Evaluación de Hechos (FFAM), un cuerpo liderado por un mayor general, encargado de ofrecer la mayor información posible para decidir si se abre una investigación criminal sobre incidentes en combate.
Notiespartano/EFE