El Ejército israelí anunció este jueves la muerte de al menos 10 milicianos palestinos durante sus operaciones en Yenín, en el norte de Cisjordania ocupada, que se han desarrollado mientras Israel negociaba con Hamás el acuerdo del alto el fuego para Gaza en Doha, y en las que han muerto 12 personas.
Entre el martes y el miércoles, en un lapso menor de 24 horas, Israel bombardeó dos veces el campamento de refugiados de Yenín, matando a seis personas en cada ocasión, entre ellas un adolescente de 15 años.
«Esta semana, las fuerzas de seguridad de Israel actuaron por la noche y detuvieron a aproximadamente 50 individuos en busca y captura, confiscaron fondos para terrorismo y armas adicionales», recogió un comunicado castrense.
Durante la operación, el Ejército asegura haber matado a 10 milicianos en dos ataques aéreos, si bien la cifra total de muertos identificados por el Ministerio de Sanidad palestino asciende a 12.
Anoche perdieron la vida Mohammad Younis Ararawi, de 33 años; Ahmad Yaseen Ararawi, de 37 años; Mahmoud Ahmad Fayyad, de 22 años; Osama Abdul-Kareem Abu Droubi, de 26 años; Mustafa Mohammad Fayyad, de 26 años; y Awad Subhi Abu Zaid, de 27 años.
El martes, por otro lado, los fallecidos fueron Mahmud Ashraf Mustafa Gharbia, de 15; Moamen Ibrahim Mahmoud Abu al Haija, de 28; Amir Ibrahim Mahmoud Abu al Haija, de 27; Hussam Hassan Issa Qanuh, de 34; Ibrahim Mustafa Qaniri, de 23, y Bahaa Ibrahim Abu al Haija, de 33.
Entre los muertos del primer ataque, Hamás reivindició como sus milicianos a Ami Irahim, Ibrahim Mustafa, Moamen Ibrahim y Bahaa Ibrahim, siendo este último considerado uno de los líderes de las Brigadas Al Qasam, el brazo armado de la organización islamista.
Las incursiones de las fuerzas israelíes en el campo de refugiados de Yenín, bastión de las milicias palestinas, ya eran constantes, pero se agudizaron tras los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023.
En estas últimas semanas, sin embargo, las fuerzas israelíes se habían mantenido al margen de los combates entre los milicianos y las fuerzas de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) que estallaron a mediados de diciembre y que todavía siguen activos.
La ANP acusa a los milicianos de utilizar a niños y mujeres para transportar munición y explosivos o espiar a las fuerzas de seguridad.
En 2024, al menos 491 palestinos murieron en Cisjordania por fuego israelí, la mayoría milicianos de los campamentos de refugiados, pero también civiles, incluidos unos 75 menores, según el recuento de EFE.
Notiespartano/efe