El Ejército de Israel atacó este miércoles aproximadamente unos «40 objetivos» de Hizbulá, entre ellos «instalaciones de almacenamiento, infraestructuras y armamento» en el área de Ayta ash Shab, en el sur del Líbano, según informó en un comunicado castrense.
«Aviones de combate y artillería de nuestro Ejército atacaron infraestructuras terroristas y objetivos adicionales utilizados por Hizbulá en el área», detallan en la nota.
Israel, además, justificó su ataque contra esta zona sureña asegurando que el grupo chií había establecido «decenas de medios e infraestructuras militares» para «atacar a civiles y soldados israelíes».
Por otra parte, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, dijo hoy que el Comando Norte del Ejército había logrado eliminar a la mitad de los comandantes de Hizbulá, sin dar cifras ni más detalles.
Por su parte, el grupo libanés reivindicó hoy también el lanzamiento de «decenas» de proyectiles contra la localidad israelí de Shomera, en su segundo ataque de este tipo y de esta envergadura contra el norte de Israel en un lapso de pocas horas.
La acción fue en respuesta a una «masacre» cometida el martes en la localidad libanesa de Hanine en el sur del país, donde se registraron «muertos y heridos civiles», explica la nota emitida por la organización, que suele responder con vehemencia ante las bajas no militares.
El martes, Israel anunció la muerte de dos miembros de la milicia chií libanesa Hizbulá en ataques aéreos perpetrados en el sur del territorio libanés, los cuales se repiten desde el inicio de la guerra en Gaza el pasado octubre.
La frontera entre Israel y Líbano vive su mayor pico de tensión desde 2006 con un intenso intercambio de fuego durante más de seis meses que se ha cobrado la vida de cerca de unas 400 personas, la mayoría en el lado libanés y en las filas de Hizbulá, que aglutina más 260 bajas de milicianos, algunas en Siria.
En Israel han muerto 18 personas en el norte (10 militares y 8 civiles); mientras que al otro lado de la frontera han fallecido unas 370 personas, entre ellos 46 integrantes de otras milicias, un soldado libanés y unos 60 civiles, incluidos diez menores y tres periodistas, además de los combatientes de Hizbulá.
Las hostilidades en la divisoria comenzaron el 8 de octubre como una muestra de solidaridad de Hizbulá con las milicias islamistas palestinas en la Franja de Gaza; pero el recrudecimiento del fuego cruzado de las últimas semanas hace temer una guerra abierta.
Notiespartano/EFE