Irán cambiará su política nuclear y doctrina nuclear en caso de que tenga que enfrentar «una amenaza existencial», afirmó este viernes Kamal Kharrazi, exministro de Exteriores de Irán y asesor del líder supremo Alí Jameneí, en una entrevista en el canal libanés de televisión Al Mayadeen.
«Esta política, de cambiar la doctrina nuclear, es una propuesta. En caso que Irán se enfrente una amenaza existencial, cambiaremos esa doctrina», afirmó Kharrazi, en aparente referencia a la propuesta planteada por parlamento iraní de modificar sus planteamientos, que hasta la fecha han sido oficialmente contrarios al desarrollo de armas nucleares.
«Tenemos todas las capacidades técnicas de producir armas nucleares y no tenemos problema en esto, pero la fatua (dictamen islámico) del líder de la Revolución impide esto», recordó Kharrazi en referencia al dictamen explícito que Jameneí hizo hace años en contra del desarrollo de armas nucleares.
Irán acató sus compromisos a condición que la otra parte también lo haga
En su entrevista, Kharrazi denunció que de momento Irán «acató» sus compromisos a condición que la otra parte también lo haga, «pero lamentablemente ellos no cumplen con sus compromisos y en vez de las negociaciones siguen las sanciones contra la República Islámica de Irán»
Estas palabras coinciden con un endurecimiento del tono de las autoridades iraníes contra Israel en los últimos días, en donde varios portavoces han asegurado que responderán con “fiereza” al ataque israelí del sábado contra objetivos militares que causó cinco muertos.
En este sentido, Kharrazi indicó además que la República Islámica responderá «a la agresión israelí» contra su país «en el momento y la forma adecuados».
Si bien las primeras reacciones al ataque con misiles israelí tuvieron un tono cauteloso, en los últimos días ha cambiado y ahora desde Irán se insiste que es una certeza que responderá al Estado judío.
Los ataques de Israel del sábado fueron una respuesta al bombardeo con unos 180 misiles de Irán el 1 de octubre, que fue a su vez una represalia por los asesinatos del líder del grupo chií libanés Hizbulá, Hasán Nasrala, en Beirut y del líder de la milicia palestina Hamás, Ismael Haniyeh, en Teherán en julio.
El pasado abril Teherán y Tel Aviv ya se atacaron directamente, en el que fue el primer choque directo entre ambos países.
Notiespartano/EFE