Los independentistas de ERC advirtieron este sábado a los socialistas que si el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, «no es capaz de mover ficha en la financiación singular» para Cataluña (nordeste de España) será «muy difícil» que este partido apoye a una hipotética investidura del líder socialista catalán, Salvador Illa, como presidente del ejecutivo autonómico, la Generalitat.
En los últimos comicios al Govern de Cataluña del pasado 12 de mayo, ERC sufrió un varapalo electoral y se quedó con 20 diputados en el Parlament, frente a los 35 de los independentistas del partido de Carles Puigdemont y los 42 de los socialistas catalanes, que ganaron las elecciones.
A pesar de sus malos resultados, los parlamentarios de ERC son clave para saber si será necesaria una repetición electoral o habrá investidura.
También son decisivos sobre qué candidato podría ser elegido, ya que optan el candidato socialista y del expresidente catalán Carles Puigdemont, que vive en Bruselas desde que huyó de la justicia tras el referéndum ilegal de independencia del 1 de octubre de 2017 y que anunció que volvería a España si era investido presidente de Cataluña.
Este sábado, la dirigente de ERC Marta Rovira puso encima de la mesa la reclamación de una financiación singular para Cataluña como condición para avenirse a hablar de una investidura del candidato socialista.
Poco después, el candidato socialista aseguró que el Gobierno español quiere «dar respuesta a la singularidad de Cataluña» para mejorar su financiación, por lo que reclamó un acuerdo de investidura que le permita ponerse a trabajar «cuanto antes» en el asunto.
El Gobierno de Pedro Sánchez apoyará a los independentistas
En su intervención en Gavà (Barcelona), Illa garantizó que el Gobierno de Pedro Sánchez tiene la intención de «escuchar» a Cataluña y la «ayudará» con la mejora de su financiación, lo que en su opinión «no es ningún privilegio, sino una cuestión de justicia».
Para Salvador Illa, esa financiación singular que los catalanes reclaman no es «un privilegio, es una cuestión de justicia», porque «no puede ser que Cataluña sea la tercera en aportar recursos y la decimocuarta en recibirlos», dijo respecto al actual sistema de financiación en el Estado español.
Estas declaraciones tienen lugar en un momento delicado para la gobernabilidad de Cataluña, tras el ajustado resultado de las últimas elecciones catalanas, que también afecta a la gobernabilidad de España, ya que Sánchez fue investido presidente con el apoyo de los independentistas.
Marta Rovira, dejo claro hoy en una intervención telemáticamente desde Suiza, donde huyó tras el referéndum independentista que el Tribunal Constitucional declaró ilegal, que no aceptará simplemente «algunas singularidades» en el nuevo modelo, sino que reclama para Cataluña una relación «bilateral» con el Estado español, al margen del régimen común, como tienen el País Vasco y Navarra (norte de España), que permita que Cataluña «recaude todos los impuestos».
A este respecto, el portavoz nacional de los conservadores del PP, Borja Sémper, aseguró este sábado que su partido va a ir en contra del «atropello económico» que, a su juicio, supone establecer una financiación «singular» en algunas comunidades como Cataluña.
Sobre este asunto, el dirigente popular dijo que España afronta un escenario en el que el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, «está dispuesto» a todo, no a lo que demandan los españoles, sino a lo que piden los independentistas, «con tal de mantenerse en el Gobierno».
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