El gobierno de Estados Unidos afirmó este martes que no tiene pruebas de que Egipto haya dado armas a Rusia y reafirmó su alianza con ese país, pese a que unos documentos filtrados a The Washington Post revelan que El Cairo planeaba dar cohetes a Moscú.
«No tenemos pruebas de que Egipto haya proporcionado armas letales a Rusia», dijo John Kirby, uno de los portavoces de la Casa Blanca, en declaraciones a la prensa a bordo del avión presidencial Air Force One.
De esa manera, intentó dejar claro que no se ha producido ninguna transferencia de armamento, pero ni confirmó ni desmintió que Egipto haya estado planeando enviar armas a Rusia, tal y como informó el lunes The Washington Post.
«Egipto es un importante aliado en materia de seguridad y sigue siéndolo», subrayó el portavoz.
The Washington Post accedió a una serie de documentos secretos que fueron publicados en marzo en la plataforma social Discord y en los que supuestamente se revela que el presidente de Egipto, Abdelfatah al Sisi, ordenó a funcionarios de su gobierno la producción de más de 40.000 cohetes para enviarlos a Rusia, que invadió Ucrania hace más de un año.
Egipto tacha información de «bulo”
Una fuente egipcia desmintió esas informaciones este martes a través de la cadena de televisión egipcia Al Qahera News, mientras que Rusia tachó de «bulo» esos reportes.
«Lo que publicó el periódico es una frivolidad informativa que no es verdad», indicó la fuente oficial, que no fue identificada por este medio que está vinculado al Estado egipcio.
Añadió que «Egipto sigue una política equilibrada con todas las partes internacionales cuyos principios son la paz, la estabilidad y el desarrollo», según la fuente, en una información también reproducida por el diario estatal egipcio Al Ahram.
Hasta el momento, no se ha emitido un comunicado oficial del Gobierno egipcio como reacción ante esta información.
En los últimos días, se ha filtrado a los medios de comunicación de EE.UU. documentos militares y de inteligencia que revelan detalles hasta ahora desconocidos de la política exterior del gobierno de Joe Biden.
Sin embargo, según ha avisado la Casa Blanca, algunos de esos documentos están manipulados y podrían ser parte de una campaña de desinformación.
Notiespartano