El estadounidense Frances Tiafoe se impuso al griego Stefanos Tsitsipas, que desperdició cuatro puntos de partido, por 1-6, 7-6 (11) y 10-6, para dar al combinado del Resto del Mundo su primera Copa Laver.
Los de John McEnroe, que habían perdido en las cuatro ediciones anteriores de la competición, hicieron un domingo perfecto, con tres de tres victorias, para levantar la eliminatoria y arrebatarle a la Europa de Bjorn Borg la Copa Laver.
En el O2, en una jornada que empezó con 8-4 a favor de los europeos, Tiafoe, verdugo de Federer y Nadal en el dobles, solventó cuatro puntos de partido en contra ante Tsitsipas y entregó los tres puntos definitivos al Resto del Mundo.
El estadounidense, después de ceder el primer set por un contundente 6-1 y ante los trece golpes ganadores de Tsitsipas, se recompuso, llevó el partido al ‘tie break’ del segundo parcial y ahí evitó la victoria del griego al levantarle cuatro puntos de encuentro.
Ante un Tsitsipas muy nervioso, Tiafoe, con un par de puntos espectaculares en el superdesempate, le metió un parcial de 8-2 al de Atenas y se tiró al suelo para celebrar su primera Laver.
McEnroe, capitán de los perdedores durante cuatro ediciones, terminó bailando sobre la pista después de finiquitar el dominio europeo. El Viejo Continente, desde la creación del torneo en 2017, se había impuesto en Praga, Chicago, Ginebra y Boston, pero cedió este domingo por 13-8 ante el Resto del Mundo.
La victoria llega en la edición más especial para su creador, un Roger Federer que no volverá a disputar torneos profesionales y que fue despedido en el O2 el pasado viernes en el dobles junto a Rafael Nadal, que tampoco volvió a jugar en el torneo por marcharse a Manacor para esperar el nacimiento de su primer hijo.
Esta edición también reivindica la figura de Jack Sock, que se ha convertido en el hombre con más partidos jugados en la competición (16), más dobles ganados (9), más victorias (10) y más puntos conseguidos (20).