La presidenta del Colegio de Profesionales de Enfermería del Distrito Capital, Ana Rosario Contreras, denunció este 6 de febrero que distintas líderes gremiales han sido hostigadas por cuerpos de seguridad del Estado, por participar en las protestas que el sector público ha organizado a nivel nacional para exigir reivindicaciones salariales.
En rueda de prensa, explicó que los métodos de los funcionarios son variados y van desde llamadas telefónicas hasta visitas a los hogares de las voceras sindicales. Indicó que el patrón de amedrentamiento resulta cada vez más preocupante.
Una de las afectadas es Yanni González, presidenta del Colegio de Enfermería del estado Barinas, quien afirmó que 12 guardias nacionales acudieron a su casa el 22 de enero para buscarla.
«Entre nuestras peticiones están el cese de la persecución y hostigamiento hacia líderes gremiales y sindicales, cosa que en los últimos días se ha visto incrementado justamente porque estamos ejerciendo acciones de protesta a nivel nacional», dijo González.
Expresó que el día de la visita de los efectivos ella se encontraba fuera de su vivienda.
Contreras aseguró que las enfermeras y enfermeros continuarán manifestándose en las calles para solicitar que se respeten sus derechos laborales. No descartó la posibilidad de un paro nacional, una medida que también han asomado algunos dirigentes del sector educativo.
«Estamos llamando al gremio de enfermería en Venezuela a que nos sumemos a jornadas de protesta nacional y para ello hemos diseñado una agenda de lucha», señaló. «Hoy iniciamos una fase de conflicto. Y el conflicto implica desde un pancartazo a un paro nacional: aquí ninguna opción está descartada».
Sin resultados de Margarita
Contreras también criticó los resultados de la tercera ronda del diálogo social con OIT que tuvo lugar en la isla de Margarita, en el estado Nueva Esparta, del 30 de enero al 1 de febrero, y que culminó sin un acuerdo para fijar un nuevo salario mínimo en Venezuela.
«¿Qué esperábamos nosotros que se diera en esta reunión de diálogo social con representación de los empresarios, del gobierno de Nicolás Maduro y de las centrales que representaron a los trabajadores?, que se atendiera la emergencia que se está presentando cuando hoy los venezolanos estamos con un salario diario de 0,22 centavos de dólar», dijo Contreras.
Actualmente, el sueldo permanece en 130 bolívares que equivalen a 5,6 dólares según la tasa de cambio del Banco Central (BCV) para este 6 de febrero. Dirigentes sindicales, incluida la presidente del Colegio de Enfermería de Distrito Capital, han afirmado que no aceptarán un ajuste salarial menor al costo de la canasta básica, que para diciembre de 2022 se ubicaba en 485 dólares de acuerdo con la Federación Venezolana de Maestros (FVM).
«¿Cuál fue el resultado del diálogo? Nombrar una mesa técnica para estudiar la posibilidad de qué mecanismos se van a utilizar para fijar el salario mínimo», comentó Contreras.
Siguen las protestas
Desde el 9 de enero de 2023 miembros de la administración pública, pensionados y jubilados han salido a las calles para reclamar derechos laborales, incluyendo la indexación del salario a la canasta básica y la eliminación del instructivo de la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre).
Por otro lado, Contreras asegura que más del 80 % de los profesionales de enfermería han abandonado sus puestos de trabajo, debido al poco ingreso que perciben por su labor.
«¿Cuántas enfermeras y cuántos enfermeros pueden aguantar con ingresos que no llegan ni a 20 dólares?», preguntó. «De vocación no se vive».
Este 6 de febrero decenas de trabajadores se concentraron en Plaza Caracas, en el centro de la capital, y marcharon hasta el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). Es la quinta semana consecutiva de protestas en el país.
Notiespartano/EfectoCocuyo