París inauguró este viernes su segunda edición de la feria de arte moderno y contemporáneo Art Basel en pleno temor a nuevas evacuaciones de museos por amenazas de alerta terrorista, todas ellas reveladas falsas hasta el momento.
El «contexto sociopolítico» actual puede enturbiar las expectativas de la organización, que confía igualmente en superar los poco más de 40.000 asistente del año pasado, reconoció a EFE Clément Delépine, director de Paris+ por Art Basel.
Otros espacios culturales, como el Palacio de Versalles, fue evacuado temporalmente este viernes por quinta vez en apenas una semana. Igualmente, fueron desalojados de forma parcial o total hasta una quincena de aeropuertos en todo el país.
El Louvre o la Gare de Lyon de París sufrieron la misma suerte en las últimas jornadas, en todos los casos sin incidentes y debido todas ellas a falsas alarmas.
Estos incidentes ocurrieron a raíz del atentado del pasado viernes, en el que un yihadista de origen checheno (20 años) asesinó a un profesor del instituto Gambetta-Carnot de Arrás. Desde entonces, el Gobierno francés elevó la alerta terrorista a su nivel máximo.
A esto se le suma la guerra entre Israel y Gaza, que ha tensionado la situación política y social en las calles de Francia, país con una numerosa comunidad judaica y musulmana.
Más de un centenar de galerías de una treintena de países
La segunda edición de la prestigiosa feria de arte moderno y contemporáneo de Art Basel en París reúne 154 galerías de 33 países de todo el mundo, en las que se mezclan todo tipo de artes, como escultura, pintura, fotografía, cerámica o vídeo inmersivo.
La voluntad de los impulsores es «poder llevar el arte fuera de los muros del Gran Palacio Efímero -donde se realiza la mayor parte de la feria- y llegar a un público más amplio y diverso» que el presente en este recinto, completó Delépine.
«Sentimos la responsabilidad institucional de poder expresarnos», insistió.
Una de las piezas que se pueden visitar sin coste es la escultura de aluminio ‘Ola’, del artista suizo Urs Fischer, que se encuentra en la plaza Vendôme de París hasta el domingo, fecha en que finaliza este evento. Igualmente, se pueden observar tres exposiciones y una instalación exterior «monumental».
Sin embargo, la mayoría de las actividades tienen lugar en el Gran Palacio Efímero de la capital gala, con un coste de 40 euros por entrada, aunque hay otras modalidades, como la de precio reducido, a 27 euros, para estudiantes y menores de 26 años.
Museos como el Louvre, Picasso o el Centro Pompidou se sumaron a esta segunda edición, así como instituciones como el Palacio de Iéna o el Instituto de Francia, donde se puede encontrar una escultura textil gigante.
«La novedad (este año) es que hemos tenido un poco más de tiempo para preparar esta edición», reconoció Delépine, que contó que el año pasado apenas dispusieron de nueve meses de preparación para sacar adelante Art Basel en París.
Art Basel nació en 1970 en Basilea y desde entonces se ha expandido por distintos países y en diversos formatos, incorporando el formato digital como una más de sus apuestas.
Notiespartano/800Noticias