Los volcanes representan una de las mayores fuerzas destructoras de la naturaleza. Cuando hacen erupción, son capaces de detonar en registros pocas veces vistas en la historia y acabar con poblados enteros. También causan horribles muertes en las personas que están en el lugar menos adecuado. Algunos de los volcanes más famosos del mundo pueden ofrecer postales espectaculares cuando se encuentran en estado pacífico. Pero cuando despiertan, nos hacen temer una catástrofe.
Si alguna vez te has preguntado de dónde vienen los nombres de los volcanes más famosos, te damos la respuesta a continuación:
Kilauea
Constantemente activo, la imagen del Kilauea es una representación clásica del paisaje hawaiano. Se encuentra en la isla más grande de este archipiélago y emergió del mar hace aproximadamente 100,000 años. Kilauea está conformado por dos cráteres: Halemaʻumaʻu, y Puʻu ʻŌʻō; este último ha estado en erupción desde 1983 y continúa arrojando lava, por lo que su erupción es la más larga de la historia de la humanidad. Su nombre significa “arrojar”, “escupir” o “gran propagación”.
Chimborazo
Ubicado al sur de Quito y junto a la ciudad de Riobamba, en Ecuador, el Chimborazo es la cumbre más alta de los Andes del norte de Sudamérica y el punto más alejado del centro de la Tierra. Se especula que este volcán hizo erupción por última vez a finales del siglo VII, pero es considerado potencialmente activo. Su nombre proviene del quechua chinpu, que significa “caliente”, y rasu, “nevado”. No obstante, algunos indígenas también lo llaman Urcurazu, que significa “cerro de nieve”, o Taita Chimborazo, que significa “Papá Chimborazo”.
Fagradalsfjall
En la península de Reykjanes, alrededor de 30 kilómetros de Reikiavik, Islandia, se ubica uno de los múltiples volcanes presentes en esta isla: el Fagradalsfjall. Entre marzo de 2021 y agosto de 2022, este volcán hizo erupciones esporádicas de baja intensidad, lo cual no presentó un peligro para los pueblos adyacentes y permitió a turistas y locales observar y acercarse a los ríos de lava que emanaban de su cráter. Su nombre proviene del islandés y quiere decir “hermosa montaña de valle”: Fagra es la forma femenina de “hermoso”, dals es el caso genitivo de dalur, que significa “valle”, y fjall significa montaña.
Etna
También conocido como Mongibello en siciliano, el monte Etna es de los volcanes más populares de Europa, así como de los más activos. Desde la Antigüedad griega este coloso inspiró leyendas que incluyen cíclopes, dioses y gigantes, y está entre los volcanes con el historial de erupciones mejor documentado. En la época grecorromana este cuerpo era conocido como Aetna, antiguo nombre de la ciudad de Catania. Tal vez ese apelativo fue tomado del griego aitho, que significa “quemar”; no obstante, su origen también podría derivarse del fenicio athana, que significa “horno”.
Paricutín
Desde el estado de Michoacán, su repentino nacimiento en 1943 asombró al planeta, pues fue el primer volcán que la humanidad vio nacer. Aquellos que lo atestiguaron cuentan que la tierra se abrió y emergió de un maizal; su erupción destruyó las comunidades de San Salvador Combutzio o Paricutín, San Juan Parangaricutiro, Angahuan, Zacán y Zirosto. Por esta razón, durante muchos años fue el volcán más joven del orbe, así como uno de los más estudiados. Su nombre en idioma purépecha, Parhíkutini, significa “lugar de otro lado”.
Monte Fuji
Su imagen ha sido representada en distintas obras de arte japonés y es un distintivo símbolo de ese país. En la actualidad está activo, por lo que es una potencial amenaza para las poblaciones aledañas. En cuanto a su nombre, existen distintas hipótesis: una es que derivó de un término ainu (grupo indígena de la región de Hokkaido) que significa “fuego”, junto con san, la palabra japonesa para “montaña”.
Otra teoría está basada en la creencia taoísta de que el volcán alberga el secreto de la inmortalidad. De ahí que fuji aluda a la “inmortalidad”. Por último, se piensa que su origen viene del Cuento del cortador de bambú, en el cual la princesa Kaguya deja un poema y un elixir de vida eterna para el emperador en su camino a la Luna. El emperador pide que ambos fuesen quemados en la cima de la montaña más cercana al cielo. El humo que se elevó desde el pico recibió el nombre de fu-shi, que significa “no muerte”.
Krakatoa
Este volcán, hoy en día desaparecido, es célebre por su mortífera erupción de 1883, que ha sido registrada como una de las más destructivas. Posterior a otra estruendosa explosión en 1930, surgió una nueva isla volcánica: Anak Krakatoa, que significa “hijo de Krakatoa”. En cuanto al nombre, Krakatoa, existen dos teorías sobre su origen: la primera es que se trata de una onomatopeya del sonido que hacen los loros blancos que habitan en la zona; sin embargo, la segunda idea es que proviene de la palabra sánscrita karkata, que significa “langosta” o “cangrejo”.