Como ha sucedido desde el comienzo de la guerra en Ucrania hace más de dos años, el Comité Monetario y Financiero Internacional, IMFC, en inglés, del Fondo Monetario Internacional, FMI, no logró fijar una postura común sobre ese país y la situación en Gaza, pero sí estuvo de acuerdo sobre los impactos económicos del conflicto.
«Los miembros del comité discutieron el impacto macroeconómico y financiero global de las guerras y conflictos actuales, incluida la guerra en Ucrania, la crisis humanitaria en Gaza, así como las interrupciones del transporte marítimo en el mar Rojo», apunta la declaración final firmada por el actual presidente del IMFC, el ministro de finanzas de Arabia Saudí, Mohammed Aljadaan.
El IMCF es el órgano que marca la hoja de ruta de las políticas del FMI y está formado por 24 miembros que son gobernadores de bancos centrales, ministros u otras personas de rango comparable. Entre ellos están representantes de Estados Unidos, China y Rusia, por lo que desde el estallido del conflicto en Ucrania no han sido capaces de emitir un comunicado final.
En lugar de esto, el presidente del organismo (antes liderado por la exviceprimera ministra española Nadia Calviño) emite un comunicado.
El IMFC asegura que Gaza y Ucrania tienen impactos significativos en la economía global
En él, Aljadaan apunta que este órgano «no es el foro para resolver cuestiones geopolíticas y de seguridad» que «se discutirán en otros foros», pero que los miembros del IMFC «reconocieron que estas situaciones tienen impactos significativos en la economía global» y que «la era actual no debe ser de guerras y conflictos».
Aljadaan participó este viernes en una rueda de prensa, acompañado por la directora general de la institución multilateral, Kristalina Georgievala, en la última jornada de las reuniones de primavera del FMI y el Banco Mundial (BM), que se celebraron esta semana en Washington.
La economista búlgara, que acaba de ser reelecta en su puesto al frente del FMI, afirmó que en la reunión del IMFC los ministros y autoridades económicas han hablado sobre la necesidad de un mundo «donde el crecimiento sea más fuerte», donde «los niveles de vida sean más altos y los países de bajos ingresos no se queden atrás».
Un mundo, añadió, que sea «más resiliente a los shocks que seguirán llegando». «Estoy muy satisfecha con el progreso que hemos logrado en áreas clave, por ejemplo, en que los países más débiles ocuparán las prioridades políticas y en la necesidad de rematar el trabajo sobre la inflación», dijo Georgieva.
El pasado mes de noviembre el FMI aprobó una propuesta para aumentar las cuotas de los países miembro en un 50 %, en proporción con sus cuotas actuales, una propuesta que siguió las orientaciones del IMFC y que será la decimosexta revisión general de cuotas que ha vivido el organismo desde su fundación en 1944.
En este sentido, Aljadaan detalló que se está trabajando «rápidamente» para asegurar que las aprobaciones internas del IMFC sobre los aumentos de cuotas estén listas «para mediados de noviembre de este año».
«Reconocemos la urgencia y la importancia de la realineación de las cuotas para reflejar mejor las posiciones relativas de los miembros en la economía mundial, protegiendo al mismo tiempo las cuotas de los miembros más pobres», afirmó el ministro.
Por tanto, el IMFC instó al FMI a trabajar para lograr, antes de junio 2025, «posibles enfoques como guía para una mayor realineación de cuotas».
Notiespartano/EFE/pem/er/gad